Como ya habían advertido, si la oposición busca anular las elecciones, el PRI no se va a dejar y se irá con todo – el poder de la legalidad- para defender su triunfo presidencial, el cual consideran fue legitimo.

En conferencia de prensa en la que no se permitió más que la voz del presidente nacional del PRI, Pedro Joaquín Coldwell, se anunció ante los medios el inicio de la defensa jurídica ante el juicio que presentará Obrador para anular la elección presidencial, recurso que Coldwell definió como “una justificación para que su candidato (Andrés Manuel López Obrador) siga vigente”.

Además de lo anterior también enumeró una a una “Las 6 mentiras” que consideran vertió el ex candidato presidencial de las izquierdas para impulsar su candidatura. Aquí el conteo (no textual):

Número uno:

No es verdad que hubo inequidad de los medios de comunicación  hacia los 4 candidatos presidenciales,  hasta la UNAM en su monitoreo dice lo contrario.

Número dos:

Es mentira que las encuestas presidenciales  estuvieron compradas. Como muestra basta un botón: de acuerdo al líder nacional del PRI, casi la mayoría le atinaron a los resultados… nomás le fallaron tantito, pero hasta en eso supieron los medios reconocer su error:

Número tres:

El escándalo de Soriana es falso, de ninguna manera la tienda de supermercado estuvo involucrada con la compra de votos, como acusa el Movimiento Progresista… lo que pasa es que después de las elecciones hubo una mega barata y todo mundo aprovechó, por eso las largas filas:

Número cuatro:

Para nada se rebasó el tope de campaña que impuso el IFE y todos los recursos que se gastaron fueron obtenidos por vía legal.

Mentira cinco:

Los gobernadores  no fueron reclutados  y mucho menos se prestaron a cuestiones perversas e ilegales como señaló AMLO el pasado jueves… y como prueba… bueno, como prueba está que las pruebas (valga la redundancia) presentadas por el Movimiento Progresista son “pobres”.

Sexta y última mentira:

Lo de las tarjetas  Monex que de acuerdo a un especialista queda como anillo al dedo para ser considerado lavado de dinero, es falso… así de tajante.

Para finalizar Coldwell no aguantó más y declaró que sí hubo fraude… el que pretende invalidar sin pruebas el voto legítimo, legal y secreto de “más de 50 millones de electores”. Pero no se preocupen,  el PRI no va a permitir que “se acuse de corruptos a millones de ciudadanos por el simple hecho de haber votado en secreto y libertad”.

 

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