No tiene plataforma ni estructura definida, pero el alejamiento que representa de los convencionalismos políticos, además de prometer transparencia y hacer que la ciudadanía participe en las decisiones, ha logrado que más gente se les una. Ahora lo que comenzó como una idea por internet, puede convertirse en la nueva corriente política alemana: el Partido Pirata Alemán.
El año pasado sorprendieron al lograr representación local en Berlin y encuestas les auguran el 5% de los votos necesarios para lograr entrar en tres parlamentos regionales más: Sarre, Schleswig-Holstein y Renania del Norte-Westfalia.
Y si piensan que lo cosmopolita y urbanístico de Berlin fue factor para que el Partido Pirata lograra tal arrastre, se equivocan; Sarre ejemplifica lo contrario: es un estado rural y de población envejecida, sin embargo este domingo ahí se realizarán elecciones y el Partido vislumbra una nueva sorpresa.
“No somos sólo un fenómeno de las grandes ciudades, podemos movilizar a muchos votantes en otras zonas rurales del país”, destaca Matthias Schrade, integrante de la dirección federal del partido.
El Partido Pirata cuenta con sólo 347 miembros y no oculta que además de la legalización de las drogas, de que haya un salario base para todos y de la protección de datos en Internet, de momento no cuentan con más propuestas. No obstante, quizá la verdadera democracia que venden es lo que ha llamado la atención de la gente: se pueden seguir las reuniones a través de Liquid Feedback y Mumble, programas que permiten una videoconferencia abierta a todos para discutir temas.
Si las encuestas no fallan y en las próximas 3 elecciones de parlamentos regionales salen bien las cosas, el Partido Pirata se convertiría en el sexto partido de Alemania.
En Europa son 14 los partidos piratas con registro oficial y otros 15 sin él; le sigue América, con seis partidos sin registro oficial; y uno más en África. México desde el 2009 cuenta con el suyo: El Partido Político Mexicano (PPMX).
Vía: La Jornada
