Váyanse chiquiteando el gas, porque –en una de ésas– tardará un poco en oírse nuevamente el melodioso “¡El gaaaaaaaaaaaaas!”… Hay paro nacional de gaseros y esta es la razón.
De acuerdo con diversos medios, los distribuidores de gas LP le van a cerrar a la llave por un rato, como respuesta a la fijación de precios máximos del combustible, el cual fue impuesto por la Comisión Reguladora de Energía (CRE) a exhorto de la Secretaría de Energía… luego de detectarse un subidón de precios.
Se “hace la invitación de no salir a laborar el día de mañana martes 3 de agosto de 2021, debido a que no se cuenta con las condiciones operativas necesarias ante esta directriz de emergencia para el bienestar del consumidor”, señala el comunicado del gremio gasero citado por Animal Político.
Aunque en dicho texto se indica que la convocatoria sólo fue para dejar de chambear ayer (suficiente para que millones de hogares se sienta el rigor de la falta del combustible para el boiler y el encendido de la estufa), en varios medios se indica que el llamado al paro es por tiempo indefinido.
Según los reportes, en al menos nueve entidades del país se ha hecho caso al llamado al paro: Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Veracruz, Hidalgo, Tlaxcala, Morelos y, claro, Estado de México y CDMX.
El paro es la respuesta de los gaseros al tope del precio del gas LP impuesto oficialmente el pasado 1 de agosto. Con este tope, indica El País, el costo cayó hasta 21 pesos por kilo… bajo la advertencia a distribuidores de respetar la tabla de precios máximos publicada por el CRE o la posibilidad de perder la licencia.
“Estaremos vigilando de cerca a las empresas para que no excedan el precio del gas LP, en caso de incidir en estas malas prácticas podrán perder su permiso. Seguimos trabajando para cuidar el bolsillo de las y los consumidores”, señaló el titular de la PROFECO, Ricardo Sheffield.
¿Por qué se estableció tope al precio del gas?
El gobierno federal decidió marcarle un tope a los gaseros, tras detectarse un alza acumulado en el precio del combustible de entre el 30 y 40%, dependiendo la región. ¡por qué tanto! Pues… realmente no hay una razón única. De acuerdo con Raúl Bravo (en la columna “Con peras y manzanas”) hay tres caminos para explicar el subidón:
Uno, por el alza internacional de precios (ocasionado por la demanda industrial del energético); dos, el efecto del tipo de cambio peso-dólar y tres (y favorito de AMLO), un posible acuerdo entre actores y jugadores preponderantes en mercado del gas LP para elevar los precios en conjunto… pero esto, ya está siendo investigado por la COFECE.
Para intentar frenar el alza del gas, el gobierno federal perfila dos caminos: el ya establecido tope de precios máximos del gas LP y la entrada al mercado del Gas Bienestar, que no es otra cosa que una empresa estatal que se encargará de hacerle la competencia a los gaseros.
