Los integrantes del PRI y el PAN de las comisiones del Distrito Federal y de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados aprobaron con 30 votos a favor, 11 en contra y 1 abstención, un dictamen sobre la iniciativa para regular y sancionar las manifestaciones públicas en la Ciudad de México.
La iniciativa del diputado panista Jorge Sotomayor Chávez, (casualmente se rumora que busca la candidatura para ser delegado de la Benito Juárez) sólo incluye a las manifestaciones de “carácter político, social, cultural y recreativo, y que perturben el tránsito en las vialidades, la paz y tranquilidad de la población de la ciudad”. Así que, si piensan irse de rodillas a la Basílica, ni se preocupen por la iniciativa.
Con esta propuesta se intenta penalizar y criminalizar la protesta, además de tener una indebida injerencia en la vida política, de libre expresión y de derechos del Distrito Federal.
Según los datos de la iniciativa, en el año 2002 se registraron 778 movilizaciones en la vía pública, en el 2009 se presentaron 4 veces más movilizaciones (aproximadamente 3 mil 200) y ya para 2010 se había llegado a 6,294, según datos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal. En 2012 la cifra se elevó nuevamente para llegar a 7,319 y la tendencia de este año indica que habrá 9 mil manifestaciones.
Justifican que las manifestaciones deben reglamentarse porque:
La expresión de las ideas e inconformidades constituye uno de los elementos del régimen democrático al igual que la libertad de tránsito y el respeto a los derechos de terceros.
Ingenuamente, en la iniciativa de ley hacen uso del Derecho Comparado para exponer los casos de Argentina, Chile, España, y Estados Unidos.
“Ciudades como Barcelona, Madrid, Buenos Aires y Washington ya cuentan con disposiciones que regulan las manifestaciones en espacios públicos”
Argentina
Chile
España
Estados Unidos.
“De lo anterior se desprende que la regulación del ejercicio de los derechos de manifestación y reunión no es incompatible con la democracia. Por el contrario, permitirá la expresión de las ideas, peticiones e inconformidades en un marco de respeto a los derechos de terceros, velando en todo momento por la integridad de los propios manifestantes y evitando que se continúe vulnerando la libertad de tránsito de los habitantes y visitantes de la Ciudad de México cada vez que se desarrolla una marcha, un plantón o cualquier concentración similar”
¿Neta?
Las propuestas son:
- Permitir únicamente las manifestaciones que se realicen de manera pacífica y mientras sus fines no sean contrarios a las buenas costumbres o a las normas de orden público, (entiéndase nada de encuerados)
- Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento y de expresión
- Será obligación de los ciudadanos el dar aviso las autoridades del DF sobre las manifestaciones que realizarán
- Si las autoridades deciden podrán prohibir las manifestaciones por motivos de orden público
- Las manifestaciones serán en un solo carril, preferentemente los laterales y/o ocupando únicamente la mitad de la vía.
- Establecer un horario de 11:00 a 18:00 para las manifestaciones
- La Secretaría de Seguridad Pública recibirá capacitación sobre derechos humanos antes de controlar manifestaciones públicas
- Señalar que las manifestaciones que se lleven a cabo en vialidades sólo podrán usar la mitad de la vía y, cuando sea posible, los participantes deberán usar los carriles laterales
- La Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal podrá disolver cualquier manifestación
- Imponer sanciones económicas y/o arresto administrativo a quien contravenga lo dispuesto por esa ley, así como a quienes dañen bienes.
Cualquier manifestación de violencia no ejercida por el Estado, es vista como un enfrentamiento. El Estado es la institución que tiene legitimidad en el uso de la violencia, es decir que son los únicos que pueden dar de catorrazos sin que se les encierre (lo cual no significa que no sea manipulado como un instrumento a favor de intereses particulares).
Los grupos de manifestantes tendrán el papel de chivos expiatorios. Sometiéndose a la violencia del Estado, el hombre pretende adquirir una certeza sobre la acción del otro, sobre la amenaza que estos representan.
La ley busca agotar la conflictividad,los chivos expiatorios son identificados como los responsables de las desgracias que pueden aquejar a la sociedad, en el caso de las manifestaciones, se les acusa de ataques a la paz pública, impedir la libertad de tránsito y daños a la propiedad ajena agraviados.
Para detonar la práctica persecutoria, poco importa la verdadera responsabilidad de la víctima, lo que realmente importa es la medida en que la naturaleza de ésta puede satisfacer las necesidades expiatorias de cada perseguidor.
Esto te puede pasar si violentas una manifestación, sino dejas pasar a los automóviles y sobre todo se busca sembrar una idea de miedo a manifestarte.
Aquí puedes consultar la iniciativa presentada por el PAN
