La semana pasada la Comisión Nacional de Derechos Humanos leyó un discurso denunciando a las policías comunitarias y la falta de seguridad en el país.
Ahora el PAN, partido que gobernó el país durante 12 años, se une a la denuncia y pide al gobierno en el poder que le ponga fin a la proliferación de los grupos de autodefensa, también llamados “policías comuniatarios”.
El domingo, el Partido Acción Nacional expresó en un comunicado “su alarma” por el surgimiento de las policías comunitarias en estados como Guerrero –donde un pueblo empezó su primer juicio civil a más de 50 presuntos criminales–, Oaxaca, Michoacán, Chiapas, Morelos y el Estado de México.
Estos grupos han aparecido ante el aumento de violencia e inseguridad que las autoridades gubernamentales no han podido frenar en las comunidades. La gente ha desintegrado los cuerpos policiacos, tomado armas y formado su propia fuerza de seguridad.
Ahora el PAN pide que el gobierno federal no centre su estrategia en la prevención, sino también en su respaldo a nivel estatal “para que no se vea una clara incapacidad del Estado para brindarles seguridad a los ciudadanos”.
Según el partido que dejó el poder el pasado diciembre, estos grupos de autodefensa comienzan a representar un foco rojo, a pesar de que el secretario de gobernación, Osorio Chong, diga que es algo que ha existido desde hace 15 o 17 años.
En el comunicado se agregó que no existe justificación para que un grupo de personas lleve la justicia a sus propias manos e “intente sustituir los poderes públicos al colocarse por encima del gobierno”.
