Si ya salió Elba Esther Gordillo, que no pueda seguirla Guillermo Padrés. El primer paso ya lo dio, al obtener su libertad por el delito de defraudación fiscal, ahora le resta enfrentar las acusaciones por lavado y, ¡listo!, libre como el viento, peligroso como el mar…
De acuerdo con Eje Central, el juez décimo de distrito en Proceso Federales de la Ciudad de México concedió al exgobernador de Sonora libertad por el delito de defraudación fiscal… y no porque sea inocente de haber birlado 70 millones 415 mil 367 pesos, sino porque consideró fundado el incidente que promovió Padrés para revisar y sustituir la medida cautelar de la prisión preventiva a la que estaba sujeto.
Con lo anterior (si es que no tuviera otro cargo en su contra), le bastaría con entregar 100 millones de pesos en garantía, presentarse semanalmente para firmar el libro de procesados y acatar la prohibición de no salir del país, para estar en completa libertad… Y de hecho tendrá que hacer todo eso (más la entrega de su pasaporte), pero no está en las calles gracias a que tiene un proceso pendiente por lavado de dinero.
Pues qué a todo dar… ayer fue un buen día para Padrés, porque además de obtener su libertad por andar de fraudulento, también se enteró que el PAN, partido de sus amores, decidió no expulsarlo de sus filas. Sin embargo, ya no es militante blanquiazul… ¿¿¿??? Bueno, ya no se considera militante no porque sus excorreligionarios así lo quieran, sino porque en el último año el interesado no refrendó su militancia panista.
Según indica Excélsior, la resolución de la Comisión Anticorrupción del PAN da por cerrada la investigación que el partido realizó sobre los presuntos actos de corrupción del flamante exgobernador sonorense… y, así como en el proceso que tiene entambado al buen Padrés, el proceso blanquiazul no sentenció negativamente al exmandatario por inocente, sino porque se declaró incompetente para promover alguna sanción contra el susodicho.
En resumen, ya que Padrés no refrendó su militancia, pues el PAN ya no puede – ni siquiera simbólicamente – sentenciar al exgober por los delitos variados que se le imputan: enriquecimiento ilícito, peculado, uso indebido de atribuciones y facultades, ejercicio abusivo de funciones, tráfico de influencias, falsedad de declaraciones, incumplimiento del deber legal, ejercicio indebido del servicio público, falsificación de documentos y operación con recursos de procedencia ilícita. Nomás…