Mucho ojo con esta noticia. Resulta que recientemente un grupo de orcas ha atacado y hundido a tres barcos frente a las costas de España.
Y aunque por sí sola la noticia así es impactante, se pone un poco más extraña porque el comportamiento de las orcas es… peculiar. Los expertos encontraron que los cetáceos no están cazando, sino que están aprendiendo a hundir barcos en equipo.
Las orcas están aprendiendo a hundir barcos
¿Cómo que están aprendiendo? Así como lo leen. El pasado 4 de mayo, frente a las costas de España, tres orcas golpearon el timón y el costado de un yate de vela. Al final provocaron que se hundiera aunque afortunadamente no hubo personas heridas. Pero si se sabe que las orcas no son agresivas con los humanos… ¿por qué lo hacen?
Bueno, la respuesta es bastante interesante. De acuerdo con el biólogo marino de la Universidad de Aveiro, en Portugal, hace un buen rato una orca hembra habría sido golpeada fuertemente por un bote, tan fuerte que la mantuvo en agonía.
La orca, a la que llamaron White Gladis, logró sobrevivir y comenzó a atacar a los barcos como un tipo de venganza. Este comportamiento agresivo fue aprendido por otras orcas adultas, por imitación, y ahora están organizándose para atacar barcos.
Va de nuez, no es que estén cazando ni que las películas se hayan vuelto realidad, esas en las que las orcas se vuelven asesinas de humanos. Solo imitaron el comportamiento agresivo de una orca que fue golpeada por un bote.
Y claro que esta solo es una teoría. Otras apuntan a que las orcas solo tienen curiosidad por los barcos y se acercan de más sin intención de dañarlos, o que están encanijadas por la pérdida de presas gracias al paso de los botes.
Esta no es la primera vez que se observan comportamientos así en las orcas. Por allá de 2020 se reportaron al menos 40 incidentes de orcas atacando a barcos y todo tipo de embarcaciones frente a las costas de España y Portugal.
Lo curioso, reportaron en ese momento, es que las orcas siempre van a buscar el timón para destrozarlo y luego continuar con el ataque.
Y es que, aunque el siguiente ejemplo no es de orcas, sí nos da una idea de la manera en que los barcos y la actividad humana invade las rutas y las zonas en donde viven ciertas especies.
Por allá de 2021 investigadores del Programa Austral Patagonia, de la Universidad de Chile, publicaron un trabajo científico en el que revelan cómo es que el tráfico de embarcaciones invaden el espacio de las ballenas en la Patagonia, región en el extremo sur del cono Sur de América.
Es importante aclarar que las colisiones de embarcaciones con ballenas han sido reconocidas mundialmente como una fuente importante de mortalidad antropogénica y lesiones graves.