Otro testigo subió al estrado para declarar en contra del narcotraficante mexicano Joaquín “el Chapo” Guzmán durante su juicio en Nueva York. Se trata del agente de la DEA (Administración para el Control de Drogas), Victor J. Vázquez, quien dirigió una de las operaciones que lograron su captura en 2014.

Sabemos que la administración estadounidense tomó la decisión de mantener al margen a la Policía Federal por el “nivel de corrupción” que existía (o existe) al interior, situación que ponía sobre la mesa una inminente fuga de información que derivaría en un fracaso de las operaciones.

¿Y cómo fue capturado el Chapo?  

A partir de enero de 2014, el agente Vázquez lideró el trabajo de inteligencia para atrapar al Chapo, a Ismael “el Mayo” Zambada y a Rafael Caro Quintero, por quien se llegó a ofrecer una recompensa de 20 millones de dólares.

Como lo mencionamos anteriormente, la DEA tomó la decisión de no involucrar a la Policía Federal por el nivel de corrupción que existía dentro de la institución, por lo que el pequeño grupo destinado a las operaciones establecieron un campamento de entrenamiento y de recopilación de datos en La Paz, Baja California Sur; y otro a la altura de Culiacán, Sinaloa, pero al otro lado del Mar de Cortés.

Un mes después de que el equipo de la DEA llegara a La Paz, –el 13 de febrero– se determinó que ya había suficiente información para creer que el Mayo Zambada estaba escondido en un rancho en Culiacán, por lo que se pusieron manos a la obra.

Cuatro helicópteros Blackhawk con 40 tropas y al menos 50 tropas de marinos en camionetas salieron de la base secreta en Baja California con rumbo al mencionado rancho en Culiacán. Al final resulta que el Mayo no estaba en el lugar aunque se lograron detener a las personas que estaban en la propiedad.

Aunque siguieron investigando y recolectando pistas, hasta la fecha el Mayo Zambada sigue libre y aún lidera el Cártel de Sinaloa (como desde 1970). Ante la fallida operación, se tomó la decisión de moverse de esa base a Topolobampo, un puerto de Sinaloa al sur de Los Mochis, estado natal del Chapo quien ahora era el objetivo.

Al comenzar a revisar cada una de las propiedades del Chapo en Culiacán, el agente de la DEA refiere que una noche el capo logró escapar por un túnel debajo de la bañera con una de sus amantes, Lucero Guadalupe Sánchez López, quien es exlegisladora en Sinaloa.

Sin embargo, la DEA logró la captura de “el Nariz”, quien los llevó a revisar 5 propiedades que estaba todas conectadas por túneles. Gracias a esta “redada”, el Chapo se las vio difíciles para regresar a Culiacán y se movió hacia Mazatlán.

Gracias a las pistas que tenían hasta el momento, el 22 de febrero de 2014, poco antes del amanecer, un pequeño grupo de marinos mexicanos entró al Hotel Miramar, a una cuadra de la playa en Mazatlán. Estaban seguros que el Chapo estaba en una de las habitaciones porque estaban escuchando las conversaciones del Cártel por medio de un canal secreto.

Una vez que los efectivos confirmaron al agente Vázquez que el Chapo había sido capturado —un código “777 Confirmado Vic”—, el agente tuvo que bajar al sótano del hotel para identificar al capo porque los marines no sabían exactamente como lucía el Chapo físicamente. Con el narcotraficante estaban su esposa Emma Coronel y sus dos hijas gemelas.

Vázquez lo vio arrodillado y dijo “Mierda, es él”.

Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com

Yo soy Gabriela Espinosa, pero díganme Gaby, si no siento que me regañan. Trabajo como reportera y redactora en Sopitas.com desde 2018 y desde entonces me enfoqué, en su mayoría, en hard news. En diciembre...

Comentarios