Mucho Pegasus en México, aunqueeee… a nivel internacional a la ONU también la espían. O bueno, a su secretario General António Guterres. Y pese que hasta el momento no se revelan las formas, la Organización de Naciones Unidas ha denunciado que es presa del espionaje.
Y, ¿a contra qué país creen que apuntan todas estas quejas y acusaciones de espionaje? Si estuviéramos en una película gabacha, seguramente sería a una nación del Oriente, pero todo indica que Estados Unidos anda detrás del espionaje a la ONU.
A la ONU también la espían
El caso de la ONU es el de su director General António Guterres, cuyas conversaciones privadas con Amina Mohammed, vicesecretaria General de Naciones Unidas, fueron intervenidas por terceros.
O sea, alguien les echó un ojo mientras Guterres y Amina Mohammed hablaban sobre la guerra en Ucrania y otros asuntos relevantes —todo esto de acuerdo con información publicada en medios internacionales.
Y pues… apenas este 18 de abril, la ONU reaccionó ante este caso, con una protesta oficial ante Estados Unidos por las el presunto espionaje contra António Guterres desde el gabacho.
El vocero de la ONU Stéphane Dujarric fue el encargado de dar este golpe sobre la mesa, al explicar que todo acto de espionaje es incompatible con las obligaciones que Estados Unidos ha firmado con la mismísima Naciones Unidas.
Ucrania
El caso de la ONU y el espionaje desde Estados Unidos se desprende de otro todavía más grande y protagonizado igual por el gobierno de Joe Biden.
Y es que resulta que en la primera quincena de abril de este 2023 fueron filtrados documentos secretos del Pentágono, que incluyen labores de inteligencia acerca de la guerra entre Rusia y Ucrania, la situación de China o qué está pasando en territorio aliado como Corea del Sur, Israel y Canadá.
Es así como, de entre toda la tanda de filtraciones, salió el rollo del espionaje a António Guterres, quien lamentó que sus comunicaciones hayan sido distorsionadas porque, según los informes, Estados Unidos cree que el secretario General está siendo demasiado tibio con el gobierno de Vladimir Putin.
Obvio estas filtraciones han sido consideradas como uno de los mayores escándalos del gobierno de Joe Biden —desde la filtración de miles de documentos sensibles con WikiLeaks en 2013— porque le ha traído consecuencias diplomáticas no tan chidas como esta queja de la ONU.
(Y también vislumbra una especie de “guerra híbrida” con la manipulación de información confidencial de un país o un activismo real por conocer en qué anda el gobierno de Biden).