El planeta nos está dando una probadita de lo que nos espera en el infierno y la ola de calor que se extiende a lo largo de cuatro continentes se ha convertido en un cataclismo que deja a su paso lamentables pérdidas humanas, pero también irreparables daños a la naturaleza.
Glaciares derretidos, sequías, incendios forestales y marcas históricas en los termómetros, son una muestra del cambio climático por el que atraviesa nuestro planeta.
En México, nos consta que cuando calienta el sol, no siempre es por obra y gracia de Luis Miguel, o la famosa canícula, conocida así por ser los 40 días más calurosos del año, que arrancó el pasado 18 de julio y aún nos esperan 33 días más para soportar la racha de calor extremo. Un ejemplo: se espera que la zona norte del país supere los 45 grados centígrados.
En los Alpes Suizos, los turistas están teniendo sus propias vacaciones del terror. El intenso calor está derritiendo el hielo a lo alto de la cordillera, dejando al descubierto varios cadáveres de alpinistas que desaparecieron en las montañas desde hace varias décadas. Incluso, hace unos días hallaron los cuerpos de una pareja que se había perdido desde la Segunda Guerra Mundial y en junio pasado, la condensación glaciar, dejó expuesto los restos de tres hermanos que habían desaparecido desde 1926; a través de pruebas de ADN, su familia los encontró casi 90 años después.
Mientras que en Grecia, los incendios están fundiendo las ciudades, tan solo en las afueras de Atenas, se reportan más de 70 víctimas mortales y cerca de 200 heridos. Las escenas son estrujantes, con gente despavorida huyendo del fuego, mientras los zapatos de las personas se derriten en el piso de tan caliente que está. En la ciudad de Mati, los bomberos encontraron los restos de 26 personas carbonizadas que murieron abrazadas.
En Estados Unidos, tampoco se salvan, los expertos advierten que California y Dallas serán de los estados más afectados por la ola de calor. En Reino Unido, viven el verano más caluroso desde 1976 y uno en donde no ha caído una sola gota de lluvia. Mientras tanto, en el desierto del Sahara, el termómetro marca los 51.3 grados
Asia tampoco se queda atrás, en Japón, donde hace 2 semanas se reportaban las lluvias más graves de los últimos años, ahora suman más de 40 muertos por calor extremo. Según la Agencia Meteorológica del país, las temperaturas actuales son casi 12 grados más caliente de las temperaturas promedio para esta época del año.
El pronóstico es que las altas temperaturas seguirán a lo largo de la semana, por lo que no está de más mantenernos bien hidratados, utilizar protector solar, no estar expuestos a largos periodos bajo el sol y por favor, ¡no dejen ni por error a niños, niñas o animales encerrados en el coche!
Además, en temporadas de calor aumentan las enfermedades gastrointestinales, por lo que no está demás echarle un ojito a los lugares en los que comemos y, aunque el calor derrita todo menos nuestra grasa corporal, no estaría mal invitar a nuestros amigos y vecinos a plantar un árbol por familia.