El COVID llegó para quedarse. Ese es un hecho que la OMS ha explicado durante estos dos años de pandemia. Sin embargo, la misma Organización Mundial de la Salud espera que para 2023 deje de ser una emergencia sanitaria.
Eso sí, si esto ocurre, cada país tendrá que poner una atención especial en sus controles sanitarios, pues como lo estamos viendo ya en esta temporada de frío, junto con el COVID hay otras enfermedades respiratorias circulando.
(Justo lo que está sucediendo en nuestro país, donde se han registrado casos de COVID, mediante distintas variantes, influenza y la circulación de más de 300 virus respiratorios).
El COVID en 2023, según la OMS
De acuerdo con la OMS, aunque ya pasó la etapa más peligrosa de la pandemia de COVID-19, es necesario que cada país ponga atención en las medidas sanitarias de prevención y atención de los casos.
Tan sólo basta saber que durante la semana pasada, menos de 10 mil personas murieron a causa de COVID y ante este registro, los países pueden hacer más para salvar vidas, de acuerdo con la OMS.
“Hemos recorrido un largo camino. Tenemos la esperanza de que en algún momento del año que viene seamos capaces de decir que el COVID-19 ya no es una emergencia de salud pública”. Aquí las palabras del director de la OMS Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Y nada más para estar en sintonía con lo que dijo Tedros Adhanom, recordemos que el concepto de “emergencia de salud pública de interés internacional (PHEIC)” se refiere al brote de una enfermedad que afecta a más de un país. Y por lo tanto, se necesita de una estrategia coordinada de manera internacional para resolverlo.
Igual otro componente de la emergencia sanitaria es que el brote es inusual e inesperado y pues la encargada de hacer esta declaratoria es la misma OMS, mediante su director.
Así que, por lo pronto, así mira la Organización Mundial de la Salud el panorama para 2023, después de que este año había declarado que el mundo estaba en una “posición ganadora ante el COVID, casi casi cerca del fin de la pandemia, aunque días después rectificó y dijo que no había porqué cantar victoria.
Por cierto, se prevé que pronto el comité analice qué onda con las variantes y el impacto del virus —y en espera de que por fin China comparta los datos que tiene sobre el origen de la pandemia.
Aunque lo cierto es que se siguen esperando olas de COVID, no tan rudas como las que vimos en los primeros momentos de la pandemia —y afortunadamente, sin la carga de hospitalizaciones o mortalidad.
