Aunque su abogado dice que a Emilio Lzoya y a él los agarró por sorpresa eseñalamiento directo de los funcionarios de Odebrecht (tanto que ni sabe bien de qué se le acusa), el exdirector de Pemex está tan seguro de que nada tiene que ver con el caso que muy en breve interpondrá una demanda contra quienes resulten responsables de haberlo embarrado en uno de los mayores casos de corrupción de Latinoamérica.

Así es. Mientras que muchos ya lo creían con maletas listas para emprender la fuga al más puro estilo Javidú, el buen Emilio informó que demandará por daño moral a quienes lo acusan de haber sido él quien se dejó seducir por la no tan fina estrategia que la constructora brasileña aplicó en otros países, con la que logró llevarse diversos contratos millonarios gubernamentales.

Así lo dio a conocer en Twitter.

Hay que recordar que desde hace meses fue señalado que un funcionario mexicano de alto nivel habría recibido varios millones de pesos como parte de la red de sobornos de la empresa Odebrecht. De inmediato quien sonó fue Lozoya, aunque fue apenas el pasado fin de semana que El Quinto Elemento Lab y O Globo apuntaron a que, efectivamente, fue Lozoya se sacó “la rifa del tigre”… incluso, especificaron que tal soborno fue de 10 millones, a cambio de que el entonces director de Pemex les echara la mano para llevarse el contrato de las obras de la refinería en Tula, Hidalgo, la cual a final de cuentas no se hizo, pero aun así, Odebrecht le sacó buenos rendimientos a su “inversión”.

Los señalamientos que embarran a Lozoya, según los medios señalados, están sustentados en documentos obtenidos de las investigaciones que se realizan en Brasil. Como parte de éstas, se tiene la declaración premiada de quien fuera director de Odebrecht en México, Luis Alberto de Meneses Weyll, quien asegura que comenzaron a pagarse los 10 melones a Lozoya cuando éste era miembro del equipo de campaña de Enrique Peña Nieto… campaña con la que a la postre se convertirá en presidente de México.

vía Twitter

Los pagos a Lozoya presuntamente se hicieron no directamente, sino a una empresa offshore registrada en las Islas Vírgenes Británicas: Latin American Asia Capital Holding, cuyo número de cuenta en el banco privado suizo Gonet et Cie es el CH 46 0483 5090 3745 3400 7. Detalle que se ve que el abogado de Lozoya, Javier Coello, ya tiene bien medido:

“Lo único que digo yo es, si a Emilio Lozoya le acreditan que él recibió el dinero, está dispuesto a ir a la cárcel si es necesario. Pero no recibió. Ahora, qué fácil es depositar en una cuenta y luego ¿por qué no le dan seguimiento a esa cuenta? Que le den seguimiento. Alguien sacó el dinero, ¿quién lo sacó? No quiero hablar de más. Yo lo único que les digo es que mi cliente y mi amigo no recibió un solo peso. Él me lo ha dicho, me lo ha jurado y me lo ha probado”.

Pero bueno, si ahora resulta que Lozoya no fue el sobornado, entonces ¿quién? Y lo que desde hace días muchos se preguntan, ¿a dónde fue a dar todo el dinero?

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