Ayer 2 de septiembre, se reportó un fuerte incendio en el Museo Nacional de Brasil, uno de los recintos culturales, científicos e históricos más grandes del país que resguarda, por si fuera poco, aproximadamente 20 millones de objetos y obras naturales o de producción humana oriundas de Brasil y otras partes del mundo. La noticia ha dado la vuelta al mundo pues, como mencionamos, este Museo es el espacio de uno de los acervos más importantes y eclécticos del hombre.
El Museo Nacional de Brasil, ubicado en Río de Janeiro, es la institución cultural más grande y antigua de Brasil que cumplió este 2018, exactamente 200 años. Fue creada por el rey de Portugal, Juan VI, en la primera mitad del siglo XIX con el firme propósito de incentivar la investigación científica en un país que era considerado como salvaje y primitivo.
Incendio consume años de historia del Museo Nacional de Brasil
20 millones de piezas, entre las que se encuentras momias egipcias y restos de meteoritos, se han perdido en el siniestro, este 2018, el museo celebraba su bicentenario. pic.twitter.com/lKyrgTO6mX
— Moises Lopez (@chapoisat) 3 de septiembre de 2018
Es bien sabido que los museos suelen exponer una pequeña parte de su acervo, y este recinto no fue la excepción. El público, durante 200 años de historia, pudo ser testigo de exposiciones permanentes que iban desde fósiles y momias sudamericanas y egipcias, insectos y animales disecados, hasta meteoritos y utensilios indígenas y descubrimientos arqueológicos del continente. El Museo tenía dentro de sus paredes una enorme colección egipcia, la cual comenzó a ser reunida por el emperador Pedro I de Brasil en el siglo XIX; o bien, la colección de objetos y artefactos grecorromanos de la emperatriz Teresa Cristina. Sin embargo, uno de los elementos más icónicos del Museo Nacional de Brasil, es el hecho que resguardó por dos siglos, objetos comunes pero extraños de la vida cotidiana.
Ahora bien. ¿Cuáles son las obras más icónicas que fueron destruidas durante este incendio? Por acá les dejamos una lista de objetos y obras de arte que representan, sin duda, una gran pérdida para la historia de la humanidad.
Luzia
Luzia era el fósil humano más antiguo de Brasil y del sur del continente. Se trata de una de las pérdidas más grandes del museo. El cráneo de Luzia tenía poco más de 11 mil años de existencia, y por esta razón, se le conocía como el objeto de este tipo más antiguo en el sur del continente. En realidad, el título del fósil más antiguo de América se lo lleva la Mujer de Naharon, la cual fue hallada en Yucatán y registra más de 13 mil años.
Luzia fue descubierta en 1974 gracias a una expedición arqueológica. Con el tiempo, se realizó un estudio que trajo como resultado la reconstitución de su rostro. Esta investigación se realizó en conjunto con Reino Unido después de que el cráneo de Luzia estuviera “escondido” por más de una década. Fue expuesto al público a finales de la década de los 90. La reconstrucción digital de su rostro significó un cambio dentro de las teorías de población de la zona, pues Luzia contaba con rastros muy similares a los de los pobladores africanos y los aborígenes de Australia.
Colección egipcia
Como mencionamos, el Museo Nacional de Brasil guardaba una enorme colección egipcia, y con esto nos referimos a que era la más grande de América Latina al registrar 700 piezas como la momia Sha-Amun-en-su. Parte de su acervo estaba conformado por momias humanas y animales disecados de la época como gatos, peces o cocodrilos. Los objetos no fueron las únicas pérdidas, sino también el trabajo de investigación que se realizaba en torno a la civilización egipcia. El museo contaba con un laboratorio especializado en este tema que abordó durante algunos años aspectos relacionados con la percepción de la muerte y su arte.
Colección de meteoritos
Conformada por más de 60 piezas, el incendio devoró una gran parte de esta colección de meteoritos. Uno de los más famosos fue el meteorito metálico llamado Bendegó, el cual era uno de los más grandes -el segundo de mayores proporciones cuando fue hallado en el siglo XVIII– y que llevaba en el museo más de 100 años. Bendegó pesa más de cinco mil kilogramos y era uno de los objetos más visitados. Algunos medios han reportado que una pieza de esta colección sobrevivió a las altas temperaturas. Las explicaciones varían, pero algunos han considerado viable el hecho de que estos objetos que provienen del espacio, para entrar en contacto con la atmósfera, también deben soportar altas temperaturas.
Fósiles y esqueletos de dinosaurio
Hace unos años, fue hallado durante una construcción en Minas Gerais, algo más grande que piedras y mucha tierra. Se trató de los restos fósiles de un dinosaurio que, con base en los estudios, registraba más de 80 millones de años de existencia. Uno de los fósiles hallados en la zona se convirtió en un hallazgo sin precedentes, pues resultó en una nueva especie dinosaurio que no había sido estudiada.