El Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, señaló que “todos los americanos deberían sentirse profundamente perturbados” por los recientes asesinatos a cargo de la policía: Alton Sterling y Philando Castile.
El primer mandatario afirmó que a pesar del resultado que logren las investigaciones, estos tiroteos no son casos aislados. En su discurso, Obama mencionó que tienen que admitir que tienen un problema serio.
Son síntomas de los grandes retos que tiene nuestro sistema de justicia criminal, las disparidades raciales que aparecen en el sistema año tras año y la resultante falta de confianza que existe entre las fuerza de la ley y varias de las comunidades a las que sirven
En lugar de caer en un patrón de división política, Obama invita a la reflexión sobre lo que se puede mejorar. “Como nación, podemos y debemos hacer mejor las cosas para implementar las mejores prácticas para reducir la aparición o realidad de la discriminación racial a la hora de aplicar la ley”.