Gleison Bremer Silva Nascimento —conocido, como buen futbolista brasileño, solamente como Bremer— es un defensa de la Juventus que fue seleccionado en la convocatoria de Brasil para el Mundial de Qatar 2022. No había sido titular en ninguno de los primeros partidos, alineará apenas en el tercer encuentro de la fase de grupos, pero su nombre ya pasó a la historia.
Y todo, porque utilizó el número ’24’ en la playera.
¿Eso qué tiene de especial? Pues que el número 24 en Brasil está relacionado con una tradición homofóbica —de la misma manera que el 41 en México, por ejemplo. Estas creencias han ocasionado ningún futbolista de la Canarinha lo haya usado en la historia del Mundial.
El número ’24’ en Brasil
La superstición homofóbica del número ’24’ en Brasil tiene una larga y enredada tradición, pero todo empieza con un juego de lotería llamado “Jogo do Bicho” —o “Juego de los animales”, si lo quisiéramos traducir al español.
Aunque es considerado ilegal, es bastante sencillo.
En el juego existen 25 casillas de diferentes animales. La 1 es un avestruz, la 2 es un águila, la 3 es un burro, la 4 una mariposa y así sucesivamente. No parece nada importante, pero la casilla número 24 es un venado, un animal que —por alguna razón— las personas más tradicionales en Brasil relacionan con la homosexualidad.
Al 24 se le empezó a conocer como el número de los ‘veados’.
Aunque ‘veado’ es la palabra en portugués para venado, también es un insulto homofóbico. Aunque no se sabe a ciencia cierta —ni queremos repetirles todas las cosas que dicen en aquellos lares— se cree que lo relacionaron porque los ciervos se consideran animales afeminados.
Pero bueno, el chiste es que así fue que terminó siendo un insulto homofóbico y desde entonces, se llenó de prejuicios.
Algunas personas en Brasil dicen que cumplen 23+1 años de edad o evitan mudarse a departamentos numerados 24. Algunos políticos de la comunidad LGBT utilizan el número en sus campañas para convertirlo, ahora, en una señal de orgullo.
Los deportistas brasileños, especialmente, son quienes han evitado el número públicamente.
Aunque existe una campaña para quitarle estigma —relacionándolo con el 24 que también usaba el basquetbolista Kobe Bryant—, el asunto sigue siendo un problema deportivo. El club Flamengo alcanzó relevancia internacional cuando impidió que un jugador colombiano usara el número. “Ese número aquí no”, dijo el presidente.
Nadie, nunca, había usado el número 24 con la playera de Brasil en una Copa del Mundo. Hasta ahora.
Bremer y el número ’24’
Aunque pasará a la historia y la situación es súper importante, lo mejor de todo es que Bremer llegó al número 24 por pura casualidad.
Las reglas mundialistas siempre exigen que los números en la playera sean consecutivos —es por eso que el Bofo Bautista usó el 21 y no el 100, por ejemplo—, pero bueno, todos los dorsales iban del 1 al 23, que era el número máximo de jugadores convocados. Eso cambió en Qatar 2022 cuando permitieron 26 jugadores.
Y así fue como el defensa de la Juventus terminó con un dorsal polémico que portará con orgullo en un momento que, además, no podría ser más interesante. Como sabemos, el balón girará en Qatar, uno de los países en donde la homosexualidad sigue considerándose un delito.
“Es una camiseta como cualquier otra, lo importante es estar en el Mundial. No importa el número”, le decía Bremer a UOL, un medio brasileño.