El COVID-19 ha representado un gran reto en la comunidad científica y médica, pues al ser una enfermedad relativamente nueva se ha ido descubriendo su comportamiento con el paso de los meses. Y sí, es gracias a eso como desde principios de año conocimos que el coronavirus de Wuhan se caracteriza principalmente por síntomas como la fiebre, la tos y el dolor de cabeza.
Sin embargo, es cierto que la investigación en torno a la enfermedad no ha parado y muchos científicos han descubierto más síntomas entorno al COVID-19, mismos que han ayudado a los médicos a detectar más rápidamente a los casos sospechosos. De hecho, dichos síntomas han sido agregados al cuadro médico del coronavirus en México.
Se llaman ‘síntomas accesorios’ del coronavirus
Así lo dio a conocer Hugo López-Gatell, Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, en la más reciente conferencia del coronavirus, donde informó que en nuestro país se han incluido tres nuevos ‘síntomas accesorios’, que ayudan a los especialistas a saber si están ante un caso sospechoso de COVID-19.
Se trata de la pérdida del gusto, la pérdida del olfato y la diarrea. De acuerdo con López-Gatell, la presencia de uno solo de estos síntomas (además de los ya mencionados) es suficiente para que una persona sea sospechosa de tener coronavirus. “Entonces, la definición es: fiebre, tos, dolor de cabeza y sólo uno, basta uno de los síntomas accesorios para considerar a un caso sospechoso de COVID-19”, mencionó.
Ayudarán a detectar mejor al COVID-19
El subsecretario indicó que esta modificación en los síntomas del COVID-19 se realizó en conjunto con el Comité Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Conave), esto con la finalidad de que la enfermedad se pueda detectar de manera correcta o más atinada, y las personas corran un menor riesgo ante el coronavirus. Algo que de acuerdo con López-Gatell, es una prioridad para el Gobierno de México.
Con la ampliación de los síntomas relativos al coronavirus se espera que se detecten más casos positivos de coronavirus. Gatell indicó que los casos sospechosos de COVID-19 deben ser tratados como si fueran positivos, además de que no existe un tratamiento como tal para el coronavirus y los médicos enviarán medicamento para tratar cada síntoma por separado.
Lo anterior quiere decir que las personas que presenten un síntoma accesorio (además de la fiebre, el dolor de cabeza y la tos) deberán someterse a una prueba y estar en aislamiento hasta que se descarte la presencia del COVID-19. Algo que esperemos, ayude a disminuir la curva de contagios que apenas comienza a disminuir en el país.
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