Clases y el servicio de transporte público suspendidos, el cierre temporal del Consulado de Estados Unidos, bloqueos y las recomendaciones de no salir de casa fueron el saldo de los enfrentamientos entre la policía y grupos civiles armados, que desde las 4 de la mañana de este 28 de noviembre convirtieron a Nuevo Laredo en una zona de alto riesgo. ¿Qué sucedió?
En la mañanera, el mismo AMLO confirmó los enfrentamientos y explicó que comenzaron por la detención del jefe de un grupo de la delincuencia organizada.
“Y hubo reacciones, pero ya se llevó a cabo esa detención y hay elementos para demostrar que él fue responsable de otros hechos violentos en esa zona y ya se le traslado a la Ciudad de México”, dijo.
Una mañana violenta en Nuevo Laredo
Ya por la tarde, después de una mañana violenta que despertó y alertó a la gente de Nuevo Laredo, el gobierno avisó que todas las actividades regresaban a la normalidad, excepto en las escuelas.
Es decir, que los momentos más cañones ya habían pasado y que poco a poco la gente podía reincorporarse a su vida cotidiana, ya con la rehabilitación de algunas de las rutas del transporte público —que también tuvo que detenerse por las balaceras.
De hecho, el Consulado de Estados Unidos en Nuevo Laredo tuvo que suspender sus actividades, avisó de esta confirmación del gobierno local y advirtió a toda la gente del gabacho que consulte las recomendaciones de viaje antes de ir a Tamaulipas —estado recién gobernado por Américo Villarreal y que adolece de la violencia extrema desde hace años.
Y es que la situación no era para menos. De acuerdo con los primeros reportes, entre las 4 y 5 de la mañana comenzaron las balaceras en varios puntos de esta ciudad fronteriza.
Los bloqueos y las balaceras estuvieron a la orden, por lo que las autoridades tuvieron que lanzar recomendaciones por “situaciones de riesgo”, pidiendo a la gente que tomara precauciones y se mantuviera informada por las redes sociales oficiales —sin dar del todo detalles de lo que sucedía.
Fue hasta la mañanera de AMLO que, de manera oficial, hubo confirmación de los enfrentamientos entre la policía y civiles armados —aunque tampoco dio detalles de qué líder se estaba hablando ni de qué cártel.
En este escenario, poco a poco Nuevo Laredo ha intentado retomar sus actividades. Hasta el momento no hay información de qué pasará con las clases de educación básica y superior, en general.