Si durante los últimos meses —o años— se han convertido en consumidores regulares de aplicaciones de envíos, de pedir comida hasta la puerta de tu casa o de recibir tus compras en paquetería, esto se puede poner interesante… y es que la CDMX presentó la intentona de un nuevo impuesto relacionado con estas entregas.
A partir de 2022, buscan que el Gobierno chilango reciba 2% de cada entrega realizada.
Se trata de una iniciativa que reformaría el Código Fiscal a partir del próximo año y que fue entregada al Congreso capitalino para que la aprueben, a más tardar, el 15 de diciembre.
Impuesto a las entregas
Escondido entre un titipuchal de páginas y cuartillas y cuartillas de iniciativa, encontrarán que el Gobierno de la Ciudad de México busca implementar un nuevo impuesto a las entregas de comida o de paquetería que se originen en línea.
Se trata de la creación del Artículo 307 TER.
Ahí mencionan que este nuevo impuesto quedaría en manos de las aplicaciones o plataformas que sirven para contratar “la entrega de paquetería, alimentos, víveres o cualquier tipo de mercancía con entrega en el territorio de la Ciudad de México”. Aunque no son específicos de las plataformas, ya se los imaginan: Rappi, Uber, Jüsto o cosas como pedir el súper en línea o acercarte a Amazon.
En el mismo artículo estipulan que el Gobierno de la CDMX quiere el 2% del cobro total de cada entrega realizada. Y que se paguen mensualmente.
¿Por qué este nuevo impuesto?
Pues porque es un friego de dinero… pero ya en serio, las autoridades chilangas presentaron los motivos por el que quieren aplicar un nuevo impuesto y se enfoca en que aprovechan la infraestructura capitalina.
“Los nuevos modelos de negocio digital que actualmente han tenido un incremento en la Ciudad de México”, señala el documento, “deben contribuir a esta Entidad, misma que proporciona la infraestructura necesaria para el desarrollo de sus actividades”.
Si quisiéramos hacer un resumen, es que —aseguran— estas aplicaciones aprovechan las calles y avenidas chilangas para realizar su trabajo. Y por ende, les tocaría pagar impuestos por ello.
Todavía no es oficial
Otra parte importante que hay que mencionar es que este nuevo impuesto no aplica todavía.
Técnicamente, empezaría a funcionar a partir de enero de 2022 y depende completamente de que el Congreso de la Ciudad de México avale la creación del Artículo 307 TER en el Código Fiscal chilango. Pueden leer la iniciativa completa AQUÍ, nomás llévensela leve que está más larga que la cuaresma.
La fecha límite para que este impuesto a las calles o los paquetes recibidos se convierta en realidad es el próximo 15 de diciembre.