Tilda Swinton duerme dentro de una vitrina en el MoMA mientras la gente se pregunta ¿a dónde hemos llegado?
Después de protagonizar uno de los nuevos videos de David Bowie, Tilda Swinton colabora con el Museum of Modern Art de Nueva York en una pieza llamada “The Maybe”. La pieza consiste, literalmente, en una vitrina con un colchón en donde Swinton duerme mientras los visitantes la observan.
El MoMA asegura que el hecho de no tener un horario establecido es parte de este performance(?)/pieza de arte: “ni siquiera el staff del museo sabía que ella vendría hoy. Estará todo el día y todo lo que hay en la caja son cojines y una botella con agua”, aseguró uno de los trabajadores del museo. “The Maybe” se presentará en fechas desconocidas a lo largo de todo el 2013 y en diferentes partes del MoMA.
Desde luego que las reacciones de los visitantes norteamericanos no se hicieron esperar pues ya han demostrado su incredulidad con vitales preguntas como “ella es ganadora del Oscar, ¿qué hace en una caja?” o bien, otros más suspicaces exigen saber lo que los doctos llaman “las condiciones de producción de la obra” preguntando acongojados si la actriz “está medicada”.
Swinton ya había presentado “The Maybe” en otros museos del mundo y se presumen que esa poderosa institución que es el MoMA llevaba años persiguiendo a la actriz par que… bueno, se echara a dormir unos días.
En las redes sociales ya se ha empezado a comentar “The maybe”: algunos atacan el pretencioso hiperrealismo al que la obra aduce recalcando su inconsistencia pues, dicen, “¡yo jamás podría dormirme con los zapatos puestos!” y les damos la razón.
Están también quienes defienden que el performance pone de manifiesto en primer lugar la naturaleza de lo fortuito toda vez que no se sabe cuándo ocurrirá (de ahí que se llame “The Maybe) mientras se juega al mismo tiempo con el concepto de la fama: ahí está, la estrella de cine y sólo eso, siendo observada, es decir, ¿la estrella es sujeto u objeto? y mientras estas discusiones se elevan alguien dice “ora sí que haz fama y échate a dormir” y una que otra risita de algún snob se reprime.
Para otros, sin embargo, basados en el tiránico y antiguo arte de la opinión fundada en las pasiones, el performance es más bien una mamarrachada.
Y para usted querido lector, ¿“The Maybe” es una refrescante propuesta o se está durmiendo el arte en sus laureles?
