La bandera arcoíris es un símbolo de la comunidad LGBT+ desde hace décadas y es prácticamente reconocida en el mundo entero. Sin embargo, en la constante lucha por la inclusión y el progreso, hace algunos años se desarrolló una nueva bandera que agrega colores, figuras y mucho significado.
Fue diseñada en 2018 pero en estos últimos meses ha sido cada vez más visible.
Como seguro la vieron en las imágenes de acá arriba, la bandera desarrolla el concepto del arcoíris que ya conocíamos, le agrega la identificación de la comunidad trans y la representación de las personas de color.
La historia del arcoíris
La historia detrás del arcoíris, como símbolo de la comunidad LGBT+, es bastante extensa.
Fue creada por Gilbert Baker y voló orgullosamente por primera vez en la marcha de San Francisco, California, en junio de 1978. Originalmente, eran ocho líneas horizontales de colores… pero con el tiempo le quitaron el rosa y el turquesa porque no era sencillo producirlas masivamente.
Así, la versión que podríamos considerar definitiva, son seis colores distintos: rojo, naranja, amarillo, verde, azul y morado.
Los motivos detrás de la bandera del arcoíris como representación LGBT+ tiene todo tipo de comunidades, momentos históricos como Stonewall y personajes históricos, desde Judy Garland hasta Harvey Milk.
Aunque la bandera original se encuentra en el MoMA de Nueva York desde 2015, los cambios y avances han sido constantes.
Filadelfia le agrega colores
La ciudad de Filadelfia, en Estados Unidos, comenzó las celebraciones del orgullo LGBT+ en 2017 con una campaña para ser más inclusivos.
El lema de la comunidad en ese año era “More Color More Pride (Más color y Más orgullo)” y se unieron con la diseñadora Amber Hikes para agregarle dos líneas horizontales más. Una negra y otra café, como una forma de visibilizar la necesidad de equidad racial.
La nueva bandera, además de agregarle representación a la comunidad afroamericana, también inspiró a un diseñador estadounidense de seguirla ampliando.
La “nueva” bandera del Progreso y Orgullo
El diseñador Daniel Quasar creó en 2018 la nueva bandera denominada Progress Pride, para representar el progreso en la comunidad LGBT+.
Tomó el arcoíris diseñado por Baker, los colores agregados por Hikes y los unió con la bandera de la comunidad trans —de rosa, blanco y azul clarito— creada por Monica Helms en 1999, para crear un nuevo símbolo de la comunidad que fuera mucho más inclusivo que todas las propuestas que habían llegado hasta el momento.
Además, hay una explicación extra sobre el acomodo y la decisión del simbolismo.
En una entrevista con Dezeen, Daniel Quasar explicó que los colores que le fue agregando están en forma de flecha, representando el avance que se ha conseguido durante décadas y la visión de movimiento. Y comentó que están pegados al lado izquierdo de la bandera para señalar que aún faltan muchas metas por cumplirse.
Esta “nueva” bandera ha dado muchos saltos en la inclusión visual y llenando de colores a la comunidad LGBT+.
Entonces, si la llegan a ver ondeando durante la Marcha del Orgullo en la Ciudad de México o se la encuentran en internet, ya conocen un poco más de la historia, las comunidades a las que representa y el progreso de décadas para hacerla más visible.