En el 2010, Kim Kardashian posó para la revista Playboy en su edición gabacha. Pasaron 2 años y la curvilínea socialité declaró quererse despegar de la imagen de símbolo sexual que ‘quién sabe por qué’ tiene.
Pero qué creen… que los buenos samaritanos de Playboy sacaron a la luz un grupo de fotos inéditas de aquella sesión. Estas imágenes pusieron furiosa a la Kardashian, y felices a quienes siempre agradecemos la oportunidad de ver a esta señorita encueradita.
Una fuente cercana a ella declaró: “Kim estaba realmente molesta cuando supo que las fotos habían sido publicadas. Se puso histérica por la manera en que salieron, nunca pensó que serían vistas”
Pues ni hablar… mal por ella bien por nosotros que tenemos la oportunidad de disfrutar esto: