Reseña y Fotos: SHARON VAN ETTEN
Viernes, 27 de marzo
El Plaza Condesa
México, DF
EL CONCIERTO
Sharon Van Etten se presentó por primera vez en su trayectoria en la Ciudad de México, parte de la gira de promoción de su más reciente y más aclamado disco, Are We There. De izquierda a derecha en el escenario, en frente: Sharon Van Etten en la voz, guitarras y omnichord (me encanta ese instrumento); Heather Woods Broderick en teclados y voz; atrás: Doug Keith en la guitarra; Darren Jessee en la batería; Brad Cook en el bajo. De hecho, ahora me doy cuenta por qué su banda de apoyo es súper solida, ya que está integrada por miembros de Efterklang, Megafaun, y Ben Folds Five. ¡Ningún novato por aquí!
SETLIST
1. Afraid of Nothing
2. Taking Chances
3. Tarifa
4. Give Out
5. Save Yourself
6. Break Me
7. Tell Me
8. I Don’t Want to Let You Down
9. Making It Wait (?)
10. All Over Again
11. Magic Chords
12. Your Love Is Killing Me
13. Serpents
ENCORE:
13. Don’t Do It
14. Love More
OPINIÓN
En realidad quisiéramos que Sharon Van Etten dejara de ser un secreto. Sin importar que tenga uno de los 10 mejores discos del año pasado, que tenga un dominio magistral sobre su voz, o que la tenebrosidad de su música te llegue hasta la médula espinal, la artista permanece una figura relativamente desconocida en México. Volvemos a lanzar una invitación a nuestros lectores a que abran su marco de referencia y le den una oportunidad a músicos que están produciendo en la actualidad un arte capaz de cruzar el umbral de los sentidos y penetrar la esfera donde se concentran las emociones. En la era del internet es de lo más sencillo del mundo y te cuesta casi nada. La idea, claro, es que al descubrir a una nueva banda, el precio de un boleto de concierto no sea obstáculo para disfrutar la incomparable belleza que es la música en vivo.
Dicho sea eso, la poca gente reunida en El Plaza Condesa –we happy few– fue testigo de la máxima expresión de una artista que está pasando por su mejor momento. Acompañada por una banda de una fuerza herculina, Sharon Van Etten tiene la libertad de pasear su voz entre melodías, jugando con vibrattos y moldeando sus lamentos. La artista sacó provecho de la buena acústica que presume el inmueble para ponernos la piel de gallina cada vez que su voz hacía dueto con el barítono de la tecladista, Heather Woods. Mientras tanto, el brazo derecho de SVE, el guitarrista Doug Keith construía texturas que hacían juego con las armonías melancólicas y siniestras de las voces. De hecho, es asombroso como hasta las canciones “felices” de Sharon pueden desgarrarte el alma, como la magnífica “Give Out”. La voz de Sharon tiene una cualidad solemne y trágica, comparable a la de Victoria Legrand de Beach House o de su amiga, Jana Hunter de Lower Dens. Son lamentos que te dejan congelados porque le confieren al espacio una belleza que no queremos dejar de escuchar.
Tras una breve presentación de Haciendo El Mal como acto telonero, el grupo de Van Etten tomó el escenario, con su setlist enfocado a darle prioridad al material de su más reciente disco, Are We There, y de vez en cuando ofreciendo algunos cortes de Tramp, y uno que otro de Epic (hablando de encores “épicos”). El nuevo material se distingue por la presencia más prominente de una banda, con más tintes de rock y country, mostrando el crecimiento de Sharon desde que era una cantautora de (anti)folk hace pocos años a la estrella de indie rock que tenemos ahora. Al hacer la transición a una presentación en vivo, los ojos ya no se concentran todos sobre Sharon, sino pueden disfrutar el panorama de una banda haciendo lo suyo, y cada uno con su propio momento bajo el reflector. Solo cuando Sharon se permite regresar a las canciones de Tramp, ya sea en su guitarra acústica o en su maravilloso omnichord (¡quiero uno de esos!) es cuando se apodera más del escenario.
Fue un concierto muy emotivo y agradable, quizás uno de los más placenteros que haya visto en El Plaza Condesa. A pesar de su timidez, Sharon siempre se mostró amable y jovial con el público, contando bromas en un español no tan fracturado (¡incluso le aventaron flores!). También nos compartió una nueva canción, todavía sin título y sin el apoyo de la banda, lo cual siempre es un bonito detalle. Esperemos que no nos deje con la primera y en un futuro no muy lejano volvamos a tener el gusto de ver en México a Sharon Van Etten. Para todos aquellos que estuvieron presentes anoche, recuerden, ya la tuvieron para ustedes solos, ahora no sean envidiosos y compartan su secreto con más gente. Ella merece ser escuchada, ¿no creen?
DURACIÓN: 1 hora y 25 minutos
FOTOS: Montserrat Castro (@MonnCastro)
RESEÑA: Shyron Van Etten (@ShyTurista)
TORREBLANCA: Un día antes del concierto, hicimos las preparaciones para un encuentro entre esta figura nacional y Sharon para una entrevista que publicaremos en los próximos días. Así que estén a la espera de eso.