Al parecer los bloqueos y quema de automóviles no están tan “bajo control” como presumió hace poco el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo… o quizás sí, pero sólo para evitar que vuelva a descontrolarse el asunto, más de mil militares ya se encuentran en la zona de Tierra Caliente. Diversos medios dicen que es para recuperar el control de la región, pero esto sería dejar al “gober” como mentiroso y cómo creen que Astudillo va a mentir respecto a la seguridad de la entidad.
En versión acapulqueña del “Blitzkrieg”, la “Operación Relámpago” buscará detener a 12 líderes de bandas delincuenciales. En lo que lo hacen -según Quadratin– la calma regresó a San Miguel Totolapan, lugar que el pasado fin de semana vivió bloqueos en la cabecera municipal y en zonas aledañas.
Para apaciguar a las autodefensas, la “Operación Relámpago” tuvo su primera fase desde el pasado viernes. Después -en su segunda etapa- se despejaron los bloqueos y dieron las “facilidades” para que la autoridad estatal ingresara a los municipios dominados por el grupo delincuencial “Los Tequileros”. Ahora, en la tercera fase de la operación se buscará la detención de los líderes que operan en la zona: Raybel Jacobo de Almonte (líder de “Los Tequileros”) y los hermanos Jhony y Alfredo Hurtado Olascoaga, líderes de “La Familia Michoacana”.
El anuncio de la llegada de los refuerzos militares a Tierra Caliente corrió por cuenta del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, quien descartó que se necesite un comisionado federal para la entidad… ¿pa’qué? Si el gobierno de Guerrero ha cumplido su función.
Así, en lo que se termina por completo la delincuencia organizada en la entidad, se irán evaluando las acciones de seguridad que se implementan. Por su parte, el gobernador Héctor Astudillo reconoció la intervención de las fuerzas de seguridad y aceptó que, sin la ayuda del gabinete federal, sería complicado enfrentar los retos en seguridad.
