Desde que nos enteramos que el multimillonario Elon Musk desembolsó 44 mil millones de dólares para comprar la red social Twitter, algunos comenzaron a preocuparse por los cambios que llegarían y, aparentemente, también por el uso que el nuevo dueño podría darle a la información y contenido publicado por los usuarios.
En cuestión de días se volvió viral un mensaje que ha sido replicado de forma masiva con la esperanza de “protegerse”. El mensaje dice:
“No autorizo. No autorizo ni doy permiso de que Elon Musk use mis imágenes, información, mensajes, fotos, mensajes eliminados, archivos y etc. Pasa este mensaje a 10 contactos para que tu perfil quede protegido“. Incluso hay algunos otros que afirman que al publicar esto en tu cuenta, tu avatar tendrá un marco verde que indica que ya estás protegido.
¿Protegido de qué? No sabemos a ciencia cierta.
La pregunta del millón…
¿Sirve de algo replicar este mensaje de “protección” contra Elon Musk?
La realidad es que no y vámonos por partes. Cuando una persona ingresa y se registra en una red social acepta ciertos términos y condiciones sobre la recopilación y uso de información/contenidos ¿Qué aceptamos cuando nos registramos en Twitter?
En la plataforma de la red social del pajarito hay una sección con los Términos de Servicio, Política de Privacidad, así como las Reglas y políticas.
La red social explica que una persona puede hacer uso de sus servicios solo si accede a firmar un contrato vinculante en el que consciente la recopilación y uso de cierta información, así como la transferencia de dichos datos a Estados Unidos, Irlanda y/o otros países para su almacenamiento, procesamiento y uso por parte de la empresa y sus filiales.
De entrada, si aceptas entrarle a la red, tendrás que proporcionar un nombre de cuenta, un nombre de usuario, una contraseña y una dirección de correo electrónico/número de teléfono. Ya al usar la plataforma, incluso si solo estamos mirando tuits, la red social recibe información personal como el tipo de dispositivo que se usa y su dirección IP.
A pesar de que los usuarios tienen los derechos sobre el contenido que publican, al usar los servicios de la red social aceptan que Twitter use, copie, reproduzca, etc. dichos contenidos en todo el mudo sin pago de derechos. Eso sí, Twitter no revela información así como a así a quien sea, tiene políticas muy específicas para eso que puedes consultar acá.
Entonces, si quisiéramos evitar que el nuevo dueño de Twitter, o incluso los antiguos, usaran esa información y nuestro contenido, la única salida es dar de baja la cuenta y no usar la red social.
Ya estando registrados dentro de ella, con una cuenta, aceptamos por default las condiciones de recopilación de información. Replicar este mensaje, en realidad, no sirve de nada si ya aceptamos las condiciones para entrar.
Ahora…
¿Cuáles son los cambios que se vendrían para Twitter?
Para empezar uno de los planes, de los que no se ha profundizado mucho hasta el momento, es aflojar el cinturón moderador de las conversaciones. El mero mero de SpaceX dejó muy claro que no está de acuerdo con estas medidas y parece que presionará para que haya una moderación más flexible en cuanto a lo que se puede comentar o no
Luego, la eliminación de los bots de spam. Es decir, la eliminación de las cuentas que fueron creadas de forma masiva solo para apoyar o inflar (o desinflar) ciertos temas.
Luego un botón para por fin poder editar tuits después de publicarlos y algunos cambios dentro del algoritmo para que se distribuya libremente.