De niños todos alguna vez imaginábamos que eramos arqueólogos o aventureros a punto de hacer un gran descubrimiento, pero nunca ocurría.
El caso de Yevgeny Salinder, un niño ruso de 11 años, es distinto –como recordarán, habíamos concluido que los rusos son lo más suertudos del mundo. El pequeño aventurero sí encontró algo: un mamut de hace 30 mil años con carne, pelaje y grasa.
El especimen, increíblemente conservado gracias al permacongelamiento, fue encontrado en Taymyr al norte de Rusia.
La criatura fue bautizada como Zhenya, por el apodo del niño. Este mamut es el segundo mejor conservado en la historia y el mejor descubrimiento desde 1901.
La criatura será puesta en exposición después de que diversos instituos de paleontología y zoología le hagan los estudios pertinentes. Mientras tanto, todos nos podemos imaginar la emoción del pequeño Yevgeny.
