Un nuevo episodio de su gustada sección “Niños chinos atrapados en…”
En un afán de estrecharle la mano a una Tortuga Ninja, una niña en China quedó atorada en la tapa de una coladera. Flexibles y resistentes como suelen ser estos chamacos, resultó sin ningún tipo de lesión, pero aun así, los bomberos tuvieron que hacer su espectacular aparición.
Confirmando la sentencia de que “es más fácil meter que sacar”, la pequeña chinita metió su mano al drenaje de su ciudad, ubicada al noreste de su país, sin embargo al momento de querer retirarla le fue imposible, por lo que los traga-fuego fueron solicitados para someter al gandalla acero.