Les aplicaron la justicia al expresidente de Francia, Nicolás Sarkozy, a su abogado Thierry Herzog y al exmagistrado Gilbert Azibert pues serán juzgados por los delitos de corrupción y tráfico de influencias.
El expresidente era investigado por unas llamadas teléfonicas:
Los jueces decidieron intervenir las llamadas de Sarkozy por la sospecha de que había recibido dinero de Muamar El Gadafi —quien murió durante el periodo de la primavera árabe—, para su campaña electoral de 2007.
En esas llamadas se descubrió la probable incidencia de Sarkozy para tratar de comprar el caso por el que era investigado: el supuesto financiamiento ilegal de la heredera de L’Oreal, Liliane Bettencourt a la campaña presidencial de Nicolás en 2012.
Hace años estas conversaciones fueron publicadas. Sin embargo, fue en 2016 que el Tribunal Supremo validó las llamadas y dejó abierto el camino de la investigación que desemboca en el llamado de Sarkozy ante la justicia francesa.
Además, el exmandatario tiene pendiente otro juicio por la presunta financiación ilícita en su campaña de 2012 —conocido como el caso Bygmalion, en el que se le acusa de la falsificación de facturas para ocultar los gastos que ascendieron al menos a 42, 8 millones de euros frente a los 22, 5 millones autorizados en aquella época—.
**Foto de portada: Reuters.
