¿Andas corto de dinero? No te preocupes, ahora tus conocimientos matemáticos pueden hacerte acreedor a 1 millón de dólares. ¿Qué debes hacer para llevártelo? Fácil, resuelve la ecuación de la imagen principal de esta nota.
Andrew Beal es un banquero texano, quien nomás por cotorrear, tuvo la ocurrencia de regalar un millón de dólares a quién encuentre la solución a la conjetura matemática que él mismo descubrió y a la que llamó “Conjetura de Beal”.
Beal ya entregó el premio a la Sociedad Matemática Americana, quienes checaran cuál de las respuestas recibidas será la correcta.
La “Conjetura de Beal” está relacionada con el “Último Teorema de Fermat”, un problema legendario que fue resuelto en 1994 por Andrew Wiles y Richard Taylor, “tan sólo” 350 años después de ser planteado.
Fue en 1993 cuando de forma casual, Beal trabajaba en su computadora buscando cómo resolver el Teorema de Fermat, y descubrió otro problema. Después consultó con varios matemáticos académicos quienes le confirmaron que en efecto, de trataba de otro teorema.
Esta teoría es fácil de plantear pero difícil de probar. Si hay algún matemático leyendo esto, le decimos:
“La Conjetura de Beal establece que las únicas soluciones a la ecuación Ax By = Cz, cuando A, B y C son números enteros positivos, y x,y y z son números enteros positivos mayores que 2, son aquellas en las cuales A, B y C tienen un factor común (como la forma 8, 6 y 10, que tiene un factor común de 2)”
¿Le entendieron? Nosotros no.
Para llevarse el premio la Sociedad Matemática Americana puso algunas reglas. Quien desee llevarse el premio tiene dos años para encontrar la solución, además debe presentar un contraejemplo o excepción. Tu solución también tiene que ser publicada en una revista matemática acreditada, además será verificada por matemáticos independientes.
Al perecer resolver esta ecuación no es tan sencillo, pues en 1997, Andrew Beal ya había ofrecido cinco mil dólares a quién la resolviera. Como nadie pudo, el monto del premio ha ido aumentando.
Esto de ofrecer dinero por resolver enigmas matemáticos no es nuevo, en el año 2000 el Instituto Clay de Matemáticas ofreció siete premios de un millón de dólares a quién solucionara siete problemas diferentes. Uno de ellos fue resuelto diez años después por el ruso Grigori Perelman, quien ñoñamente rechazó el millón argumentando que no le interesaba ni el dinero ni la fama.
¿!¿!Por qué diablos nunca puse atención en mis clases de matematicas!?!?