Mmm, como que no tiene mucho sentido la amenaza del presidente de El Salvador, Nayib Bukele… o qué pensará un pandillero: “seeee, yo, quien usted ha reconocido que nunca ‘me he tentado el corazón’ para cometer crímenes, voy a dejar de hacer lo mío, sólo porque un sujeto que está en la cárcel (que ni conozco) se va a quedar sin comer”…
Peeeeero bueno, ese es el movimiento que hace Bukele dentro del ajedrez contra la violencia que lleva más de una semana jugando. Un movimiento desesperado y riesgoso, dicen unos, luego de que han corrido rumores que apuntan a que los pandilleros comenzarán a atacar a la población civil, así, al azar.
“Hay rumores de que quieren comenzar a vengarse con la gente honrada (…) Hagan eso y no va a haber un tiempo de comida en las cárceles. A ver cuanto tiempo duran sus homeboys adentro. Les juro por dios que no comen ni un arroz”, advirtió Bukele en un mensaje difundido en sus redes sociales.
“Ustedes desatan una ola de criminalidad y nosotros quitamos la comida en las cárceles”, agregó Bukele en el mensaje en el que repitió lo que ha dicho desde que decretó el estado de excepción en El Salvador: va con todo lo que cree que disminuirá la violencia, no importando que se cometan violaciones a derechos humanos.
“No me importa lo que digan los organismos internacionales. Que vengan a proteger a nuestra gente, que vengan a llevarse a los pandilleros, si tanto los quieren”.
Desde finales de marzo, luego de un incremento notable en los homicidios, Nayib Bukele decretó estado de excepción en El Salvador y, con ello, otorgó a las fuerzas de Seguridad luz verde para actuar como dios les dé a entender contra pandilleros… o a quienes vean sospechosos de serlo.
Con esta acción, hasta el momento van más de 6 mil detenidos. Así que las cárceles seguramente están algo apretadas, tomando en consideración que, según Bukele, antes del estado de excepción ya había 17 mil pandilleros encerrados.
“Mejor estense tranquilos y déjense arrestar. Por lo menos ahí adentro [en la cárcel] van a vivir y a tener comida”, agregó Bukele, quien se coloca como único defensor de la justicia en El Salvador (y quizás del planeta). Según él, financistas, narcos, políticos y jueces, ONGs de derechos humanos, la comunidad internacional, la CIDH, periodistas y medios de Open Society, etc, etc, etc… toooods defienden a los pandilleros.
“Vendrán condenas, noticias falsas desde sus medios, demandas internacionales, financiamiento del terrorismo, etc. Pero si Dios y el pueblo están con nosotros, ganaremos”, aseguró Bukele en uno de los muchos mensajes difundidos en sus redes.