Crisóforo Maldonado era uno de los líderes de “Los Rojos”, banda de secuestradores y narcotraficantes que operaban en Morelos. La noche del pasado domingo fue asesinado en un Hospital Médica Sur del Distrito Federal.
Esta es la historia del primer hombre ejecutado en un hospital de la Ciudad de México.
El pasado 10 de diciembre, Crisóforo Maldonado alias “El Bocinas” y Antonio Román Miranda alias “La Moña”, este último jefe de los Rojos, fueron baleados en Cuernavaca. Tras el atentado, Crisóforo fue trasladado con vida a una clínica del IMSS de aquella ciudad para su atención.
Antonio Román Miranda fue detenido y se encontraba resguardado en las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública del estado, donde días después escapó.
El pasado 10 de diciembre, Crisóforo Maldonado desapareció del hospital. A raíz de este escape, Graco Ramírez, gobernador de Morelos, anunció la detención de policías ministeriales y municipales, así como de un médico:
“Ellos protegieron al delincuente del hospital. Ellos protegieron que se fuera ese señor, ellos lo protegieron, ministeriales y policías municipales y están detenidos… coludidos, protegiendo, los tenemos filmados y ante esa evidencia los tenemos ya bajo arresto y vamos a consignarlos”.
Al final, fueron once los policías arrestados por la fuga de ambos narcotraficantes.
Después de su escape, “El Bocinas” viajó al Distrito Federal y se internó en el Hospital Medica Sur ubicado en Tlalpan, para ser atendido por las heridas de bala del atentado. Se le ingresó en el primer piso de la Torre Uno, área destinada a la terapia intensiva.
La medianoche del pasado domingo, tres hombres ingresaron al estacionamiento principal del nosocomio en un auto oscuro. El conductor se quedó a bordo del vehículo, mientras sus cómplices, disfrazados como doctores, se dirigieron por las escaleras hacia el área de terapia intensiva.
Al llegar al cuarto ocupado por Crisóforo, uno de los sujetos ingresó y usando una pistola con silenciador le disparó. Minutos después, los dos falsos doctores salieron a pie y salieron por la puerta de servicio, donde ya los esperaba su cómplice en el auto.
La Procuraduría Capitalina confirmó que el nombre del asesinado es Crisóforo Rogelio Maldonado Jiménez, el mismo que siete días antes se había fugado de una clínica en Cuernavaca.
Ayer, el hospital Médica Sur fue vigilado por policías y guardias de seguridad privada.
La banda de Los Rojos controla los municipios de Temixco, Emiliano Zapata y Jiutepec, en Morelos, y disputa la plaza de Cuernavaca con otras organizaciones delictivas. También tiene presencia en Guerrero. Se dice que está ligada al cártel de los Beltrán Leyva.
Vaya historia, como de serie policiaca. Por desgracia es parte de la realidad que vivimos día con día.
