El diario estadounidense The New York Times ha sido uno de los medios de comunicación más críticos de la figura del presidente Donald Trump. La “fallida” publicación, como el magnate la ha calificado durante los últimos meses, nombró a Trump, en septiembre de 2016, “el peor candidato en la historia moderna de Estados Unidos”. El periódico también consideró que la mayoría de las promesas de campaña del mandatario estadounidense eran prácticamente irrealizables y que el político neoyorkino prometía la luna y “ofrecía las estrellas como garantía”. The New York Times incluso lanzó una campaña televisiva en la que criticaba abiertamente las descalificaciones que le presidente ha hecho contra la prensa asegurando que “la verdad es más importante que nunca“. Siguiendo esta tónica, el pasado sábado 8 de abril, el diario neoyorkino publicó una editorial en contra de Trump y su propuesta insignia de campaña: el muro fronterizo.
El periódico indicó, en su editorial titulada Contra la pared, que el muro que Donald Trump pretende construir en la frontera compartida entre México y Estados Unidos “es un señuelo, una falsificación y una mentira“, además que era una lástima que muchos factores no se consideraran antes de que la idea del muro tuviera luz verde. “Ha sido un viaje notable para una idea idiota que comenzó como una línea de aplausos”, sentenció el diario. De acuerdo con los pronósticos de The New York Times, millones o miles de millones de dólares serán desperdiciados en la construcción de la barrera que, incluso los mismos funcionarios del equipo de Trump, han calificado como inviable y que no ataca el problema de la migración ilegal y contrabando desde la raíz. ¿Lo más absurdo del caso? Cientos de empresas han inscrito sus proyectos y diseños para ganar la licitación del muro. Para la publicación hay dos certezas al respecto: los finalistas serán presentados en junio y la obra dejará pérdidas millonarias.
Las preguntas que derrumban el muro de Trump
Como para echarle más sal a la herida, The New York Times dejó al aire una serie de cuestionamientos para entender el nivel de incongruencia que representa la construcción del muro de Trump. Aquí recopilamos algunos de los que nos parecieron más representativos y relevantes.
1.- ¿Cómo construir un muro a lo largo de los mil 200 kilómetros del río Grande (río Bravo), el tramo de Texas de la frontera? ¿Lo ponen a nuestro lado y abandonan el río a México, o se apoderan del territorio mexicano, o lo ponen en medio del río, o hacen algún compromiso en zigzag?
2.- ¿Cómo se trata con los propietarios privados? ¿Qué pasa con los indios Tohono O’odham, cuya reserva se extiende a lo largo de la frontera en Arizona y que no quieren ninguna parte de un muro en su tierra sagrada?
3.- ¿Cómo se superan los túneles profundos, drones y catapultas? ¿Qué pasa con las toneladas de drogas que pasan por los puertos existentes? ¿Sabías que los cárteles de la droga tienen barcos y submarinos?
4.- ¿Cómo evitas causar más muertes cuando una frontera parcialmente amurallada envía a migrantes a zonas más remotas y mortales de desierto?