En mayo pasado las secretarías de Economía y Salud presentaron un plan para el reinicio de actividades económicas que contempló la preparación de las empresas, el semáforo epidemiológico y la operación de los Municipios de la Esperanza. ¿Se acuerdan?
Este plan fue creado con el objetivo de que México caminara hacia la nueva normalidad evitando la alta transmisión de contagios de coronavirus. Y los Municipios de la Esperanza se convirtieron en algo así como un referente para calar qué tan preparadas estaban las empresas, gobierno y sociedad para retomar actividades.
Sin embargo, los reportes sobre las actividades en los Municipios de la Esperanza no tuvieron seguimiento y la Secretaría de Salud (SSa) decidió no darles mucho peso. ¿Por?
Los Municipios de la Esperanza
“Se definieron como los municipios por la esperanza a todos aquellos que en los últimos días no han tenido casos y cuyos municipios vecinos tampoco han tenido casos en los últimos 28 días”, explicó la SSa.
Es decir, aquellos municipios que NO registraron ningún caso de coronavirus —en un periodo de 28 días— entraron en la lista que la Secretaría de Salud dio a conocer el 16 de mayo.
En un principio se habló de 324 municipios pero la cifra se redujo.
En total, se trató de 269 municipios ubicados en Chiapas, Chihuahua, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Nuevo León, Oaxaca, Puebla, San Luis Potosí, Sonora, Tamaulipas, Veracruz y Yucatán —que estaban, por así decirlo, libres de coronavirus previo a la aplicación del semáforo epidemiológico.
Peeeeeeeeero.
Entran en escena los gobiernos locales
Ante el anuncio de la Secretaría de Salud, algunos gobernadores locales decidieron NO aplicar el plan —argumentando que los municipios serían expuestos a los contagios de COVID-19.
Enrique Alfaro, gobernador de Jalisco, y Héctor Astudillo, gober de Guerrero, dijeron que no existían condiciones para poner en marcha la apertura de los municipios y prefirieron seguir con sus rollos.
Oaxaca y Chihuahua también prefirieron darle la vuelta al plan y aplicarse acorde sus registros.
Al ver esta reacción, la Secretaría de Salud tuvo que salir al paso y recordar que el reinicio de actividades económicas en los Municipios de la Esperanza no era obligatorio y un par de días después de su presentación decidió no dar reportes semanales sobre su estatus.
De acuerdo con Hugo López-Gatell, se tomó esta decisión para no confundir a la gente entre las indicaciones del gobierno de AMLO y los estatales.
“No queremos traer la lista y que eso introduzca un elemento de confusión cuando la gente que vive en estas localidades vea la información”, dijo López-Gatell en mayo pasado.
¿Qué pasó con los Municipios de la Esperanza?
Algunos de los Municipios de la Esperanza se animaron a reiniciar actividades, pero el resultado fue el brote de coronavirus en la zona.
De acuerdo con un conteo hecho por Reforma, en tres municipios de Chiapas, siete de Guerrero, uno de Hidalgo, 10 de Jalisco, 1 de Michoacán, cuatro de Nuevo León, 39 de Oaxaca, tres de Puebla, cuatro de San Luis Potosí, dos de Sonora, uno de Tamaulipas y cuatro de Veracruz se registraron casos de COVID-19.
Del otro lado de la moneda, Dzoncahuich, Yucatán, —uno de los Municipios de la Esperanza— no retomó las actividades y decidió permanecer en cuarentena. Actualmente, este estado se encuentra en semáforo naranja y al igual que otras zonas, lucha para mitigar los contagios de coronavirus.
De acuerdo con Expansión, a tres semanas de la presentación del plan, sólo quedaban 60 Municipios de la Esperanza en seis estados.
