Pensamos que gran parte de la televisión mexicana es chafa y decadente. Luego checamos programas de otros países y cambiamos un poco de opinión.
Eso nos pasó cuando vimos El último pasajero, un programa de la televisión peruana transmitido por el canal Frecuencia Latina, donde el pasado viernes se realizó un asqueroso concurso, que ha generado polémica e indignación en distintas partes del mundo. Y es que para ganarse un viaje a Cancún para tres personas, hicieron que una niña se comiera una ensalada que tenía entre sus ingredientes más de media docena de cucarachas.
Está de más decir que aquello, además de humillante, resultó asqueroso. Por más que los conductores del programa haya dicho que las cucarachas no venían del desagüe, sino que eran de cultivo y estaban limpias, la imagen de una menor sufriendo por terminarse el platillo ha indignado ha varios sectores de la sociedad peruana y de otros países.
Para hacer aún más difícil el reto, esta niña, alumna del colegio ‘Melitón Carbajal’, debía comer cucarachas mientras en el público, su enamorado (así les dicen por allá) estaba junto a su ex. Ya ven, todo un drama de primer mundo.
Los dejamos con estas imágenes para que emitan su propio juicio:
WTF?!?!
Tras toda esta polémica, y las voces que se levantaron en contra del programa de televisión, la cadena de televisión Latina tuvo emitió el siguiente comunicado:
“A todos nuestros televidentes:
Con relación a la emisión de nuestro programa del pasado viernes 20 de marzo, en que una de las pruebas incluía ingerir algunos insectos, lamentamos no haber apreciado las susceptibilidades de nuestras audiencias sobre los hechos y las imágenes transmitidas.
Es nuestro afán el de la mejora constante y revisaremos todas nuestras secciones con el objetivo de seguir brindando entretenimiento de calidad incorporando y respetando siempre las opiniones de nuestras audiencias.
Nuestro compromiso es demostrarles que es posible hacer una televisión moderna, versátil y auténtica, pero también seria, con contenidos de calidad, producción de primer nivel y conciencia social, promoviendo el respeto, la igualdad y la competencia sana”.
El mismo comunicado fue leído en vivo durante otra emisión de El Último Pasajero:
¡Padrísima la calidad que manejan los peruanos en sus producciones!
Algunos argumentan que la niña no fue obligada a comer cucarachas, sino que lo hizo por su propia voluntad, además de que estos insectos llegan a ser hasta nutritivos, pero ¿de verdad es necesario ese tipo de humillaciones a una menor de edad?