El nuevo disco de Mumford & Sons ha sido muy hablado dentro de los medios musicales, no sólo porque marca el regreso de la banda después de tres años de que se estrenara Babel, sino por el nuevo sonido con el que vuelven. Un sonido que contrasta con el folk al que nos acostumbraron en sus dos primeras placas y que nos recuerda mucho al brit rock de inicios del dos mil. Las primeras reacciones del público -sobre todo las de nuestros lectores- ante los primeros sencillos de Wilder Mind han sido de desconcierto y en muchos casos de rechazo total ante este cambio de dirección.
Lo entendemos, cuando la casi infinita marea de música internacional saca a flote algo que logra atraparnos, quisiéramos que se quedara así para siempre… ¿o no? Hay un dicho por ahí que reza: “Si no está roto, no lo arregles”, pero ¿cuánto tiempo puede quedarse estática la propuesta de una banda sin volverse tediosa y predecible? ¿Cuántas bandas hemos visto morir -especialmente la década pasada- por su falta de inventiva? y ¿a cuántas hemos visto durar años y años hasta volverse una caricatura de sí mismas?
Después de tener la oportunidad de escuchar Wilder Mind completo en las instalaciones de SopitasFM podemos decir dos cosas: uno, lo que nos entregaron los dos primeros sencillos de Mumford & Sons es básicamente un resumen del resto del álbum y dos, la apuesta que hicieron los originarios de Inglaterra fue muy alta.
Este último punto es el que nos mantiene con ánimos. El que no arriesga no gana, no hay más. Puede que este primer experimento no sea el más llamativo de sus trabajos, pero como nos dijeron ellos mismos en entrevista “con suerte, éste es sólo el inicio de un largo periodo para esta banda”. Un periodo de verdadera evolución y madurez musical.
Al final, al estar parado entre escepticismo del periodista y la esperanza del fanático no nos quedó más que ir a la fuente y entrevistar a Marcus Mumford para tratar de entender de dónde viene y a dónde va esta decisión.
Les dejamos el nuevo disco de Mumford & Sons para que lo escuchen mientras leen nuestra conversación:
¿En algún momento del proceso de grabación temieron que sus fanáticos no aceptaran bien este nuevo sonido?
No lo temimos, algunas personas vendrán con nosotros y algunas no, perderemos algunas personas y ganaremos otras.
Aquellos a los que les gustamos por nuestras canciones y esas cosas -ya que nos consideramos una banda que se basa en sus canciones- espero que podamos conservar a esos chicos.
¿Este nuevo sonido es sólo un experimento o el inicio de una etapa diferente para la banda?
… En los últimos dos álbumes estuvimos tocando instrumentos que no fueron nuestros primeros instrumentos, así que de alguna forma esto es un poco más natural para nosotros. Crecimos amando el rock and roll y la música eléctrica, pero pasamos por un periodo de realmente amar tocar instrumentos acústico. Pienso que escogimos la instrumentación que sentíamos apoyaba las canciones que estábamos tocando y que disfrutamos en su momento, pero con suerte, este es sólo el inicio de un largo periodo para esta banda, así que creo que cambiaremos bastante y evolucionaremos sonoramente, pero pienso que las canciones y las letras siempre serán lo más importante en nuestra banda.
Hay un sonido muy marcado de brit rock en casi todo el álbum ¿creen que esto un resultado que nació de la experimentación con instrumentos eléctrico o una búsqueda deliberada por transitar ese camino?
Crecimos con esa clase de música, Oasis y Blur sonaban en el radio cuando nosotros estábamos creciendo y obviamente tienes a The Beatles a tu alrededor todo el tiempo cuando creces en el Reino Unido. Así que… sí, creo adoptamos bastante el brit rock y me siento muy honrado de ser parte de la música pop británica y realmente disfrute estos “momentos” ingleses en la grabación. Es algo que amamos y algo en lo que creemos.
¿Fue fácil compartir la visión que ustedes tenían del disco con James Ford?
Sí, lo entendí muy rápido. Escuchó muchas canciones, teníamos como una 30 canciones listas para oír y captó nuestra visión muy rápido, entendió lo que queríamos hacer y nos ayudó a realizarlo.
¿En vivo habrá arreglos de la canciones pasadas que converjan más con estas nuevas composiciones?
No lo sabemos con certeza aún. Por el momento sólo estamos tocando las nuevas canciones en vivo para calentar y porque nunca las hemos tocado en vivo. Las viejas canciones de los primeros dos discos –las que tocamos antes de grabarlas y sabíamos cómo iban–, sabíamos cual era la reacción de los fans sobre esas canciones. Estaban probadas en vivo, pero estas nuevas canciones fueron compuestas en el estudio y nadie las ha escuchado, así que por el momento sólo las estamos tocando en vivo para acostumbrarnos a ellas, pero por supuesto tenemos que tocar las viejas canciones y queremos tocarlas.
¿Creen que esta experiencia cambió la manera en la que abordan sus instrumentos?
Claro, estando cerca de James Ford, Aaron Dessner e incluso estos chicos [la banda] a quienes tratas de impresionar, haces lo mejor que puedes. También, estando en el estudio quieres que todo suene nueve y excitante, así que encontramos nuevos sonidos en esos instrumentos.
En 2013 anunciaron que iban a descansar por un tiempo considerable, pero en pocos meses después comenzaron a trabajar en estas nuevas canciones ¿después de la gira de Wilder Mind se tomarán ese largo descanso?
Aún no sabemos. Veremos cómo va todo.
Después de todo lo platicado y lo escrito pasamos a los más importante: ¿ustedes qué opinan?