Esta es una muestra de la situación que se vive en el sistema de salud público en CDMX y el Estado de México —entidades que han superado el límite de hospitalizaciones por COVID-19, de acuerdo con el semáforo epidemiológico de la Secretaría de Salud. Afortunadamente, esta historia tuvo un buen desenlace y la joven que estaba en labor de parto pudo dar a luz en el Hospital Materno Infantil Inguarán, en la alcaldía Venustiano Carranza.
Todo comenzó en la madrugada del 16 de diciembre, cuando Maricela —una joven de 23 años de edad— empezó a tener contracciones y junto con su pareja decidieron salir de casa para buscar atención en un hospital público.
Paramédicos del #ERUM y policías de la #SSC coordinaron el apoyo médico para una joven en labor de parto. https://t.co/XJB6hAJeR3 pic.twitter.com/W44CoRr5gl
— SSC CDMX (@SSC_CDMX) December 16, 2020
Pero ahí también comenzó la odisea para que uno de estos hospitales recibiera a la pareja de Tlalnepantla, Estado de México, pues los hospitales a los que acudieron estaban saturados.
La odisea para que Maricela fuera atendida en un hospital público
Desde las 2:30 horas la pareja mexiquense inició la búsqueda de un hospital donde Maricela pudiera ser atendida. En total, tocaron base en cuatro instituciones peeeeero todas estaban llenas o no había incubadoras.
De acuerdo con el testimonio de la pareja de Maricela, primero se lanzaron al Hospital Regional de Ticomán, donde el personal médico les indicó que no había incubadora y los mandaron al Hospital de la Mujer.
Pero igual, ahí la pareja recibió la misma respuesta y tuvo que regresar a Ticomán. En el Hospital Regional fueron rechazados por segunda vez —aunque en esta ocasión la pareja fue remitida al Centro Médico Nacional Siglo XXI, en la colonia Doctores, alcaldía Cuauhtémoc.
Sin embargo, aquí no terminó la historia de Maricela. Poquito antes de que llegara a Centro Médico, Maricela tuvo contracciones más fuertes. La pareja se estacionó detrás de una patrulla y pidió el apoyo de los policías —Felipe Laurel Lucero y Víctor Castro.
Los oficiales se rifaron e intentaron ingresar a Maricela a Centro Médico. Sin embargo, de nueva cuenta fue rechazada.
Ante esta respuesta, los policías pidieron una ambulancia pero igual ayudaron a la pareja y se prepararon por si la joven daba a luz en esos momentos.
¿Qué pasó después? Uno de los policías, Felipe Laurel Lucero, llamó a su esposa y a su hermana —enfermeras— para que lo asesoraran a la distancia, además de aplicar lo aprendido en el curso de primeros auxilios.
Afortunadamente, mientras se preparaban los policías, paramédicos del Erum llegaron al lugar, atendieron a Maricela y la llevaron de inmediato al Hospital Materno Infantil Inguarán, donde —al fin— dio a luz a un niño.