Mientras CDMX celebra que llegó a la meta de vacunación —con al menos una dosis— de la población mayor de 18 años, en Moscú la situación está súper complicada por el aumento de los casos de COVID-19, tanto que ya suspendieron las clases y cerraron algunos trabajos.
De hecho, Vladimir Putin decretó días no laborables para poner un freno a la movilidad. El decreto empezó ayer (28 de octubre) y tiene vigor hasta el 7 de noviembre, con un llamado especial a las personas adultas mayores —sobre todo, aquellas que no están vacunadas contra COVID-19— para que no salgan de casa, en lo que podría ser un confinamiento de hasta cuatro meses.
Suspenden clases y cierran trabajos por repunte de COVID en Moscú
“La pandemia no se detienen, los contagios y el número de hospitalizaciones han aumentado“, dijo Sergey Sobyanin (alcalde de Moscú) para anunciar un trancazo más:
El cierre —temporal— de empresas y organizaciones que no tengan que ver con los servicios para que la ciudad siga funcionando y la suspensión de clases.
Allá en Moscú van a aplicar las clases a distancia tanto para universidades, secundarias y educación básica. No hay de otra.
Va a pasar lo mismo con las clases de kínder y aquellas familias que tengan que salir a trabajar —porque les tocó— podrán contar con el servicio de guardería.
COVID-19 y niños
En Moscú también están preocupados porque hay cada vez más registros de niños y niñas con COVID-19. Según el alcalde, hasta el 21 de octubre había 13 mil niños y niñas en tratamiento, alrededor de 200 estaban hospitalizados y ahora las autoridades sanitarias pusieron la mira en los y las adolescentes con comorbilidades, pues corren un mayor riesgo contra COVID-19.
Según expertos rusos, Moscú llegó a esta situación extrema por la lentitud de la campaña de vacunación, el desbordamiento de hospitales y la desconfianza de la gente ante el gobierno de Putin —por AQUÍ puedes leer más acerca de lo que pasa en Rusia.
Here we go again: Moscú regresa al confinamiento por aumento de muertes por COVID