Un relajo que ya se veía venir y que no deja de ser irónico por tratarse del partido de AMLO. Ahora resulta que Morena tiene dos presidentes: uno legítimo y otro chafón. Ahí, los afiliados al partido escogerán quién es quién entre Yeidckol Polevnsky y Alfonso Ramírez Cuéllar.
Luego de que el IV Congreso Nacional Extraordinario eligiera el pasado domingo a Ramírez Cuéllar como nuevo líder interino, lo cual significa que ya le dieron las gracias a Yeidckol… ésta saltó de volada para advertir que la elección del nuevo líder interino no vale. ¿Por?
Va la lista de Yeidckol: 1) no tuvo el quorum (aunque supuestamente hubo mil 310 congresistas del partido, 2) fue convocado por consejeros y no por consejos, como está marcado en los estatutos del partido y 3) Ramírez Cuéllar era inelegible, ya que el estatuto no permite que los militantes tengan cargo de dirección y de funcionario público al mismo tiempo… y pues Ramírez Cuéllar es diputado federal.
Por todo lo anterior, Yeidckol amenazó que impugnará la elección de Ramírez Cuéllar ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), al considerar que dejarlo como líder interino de Morena sería una violación a la ley.
“Se ve muy mal que hayan hecho una convocatoria plagada de irregularidades en todos los consejos. Nuestra postura es por la legalidad, es lamentable que hayan quitado a mis compañeros de esa manera, es una injusticia”, dijo en entrevista para El Universal la todavía líder de Morena, según ella.
De acuerdo con La Jornada, Yeidckol aseguró que todavía es secretaria general de Morena… y, claro, presidenta en funciones del partido. “Yo tengo la legalidad de mi parte”.
Por su parte, Ramírez Cuéllar ya hasta solicitó licencia como legislador a la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, para poder desempeñarse como líder interino de Morena… nomás en lo que convoca a elecciones generales, las cuales habrán de celebrarse en los próximos cuatro meses.