El análisis de tres momias incas reveló el uso de drogas en el antiguo ritual de capacocha.

La chica que aparece en esta foto no asistió a una consulta médica; murió hace 500 años y la están examinando.

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Según un reportaje de National Geographic, esta niña y otros dos niños fueron abandonados en una montaña como ofrendas a los dioses, el sacrificio se dio cuando tenían 13 años de edad. El análisis bioquímico del cabello de la niña dio un registro de lo que comió y bebió durante los dos últimos años de su vida.

El rito de Capacocha buscaba mantener el orden cósmico en circunstancias difíciles para los incas, como la muerte del emperador, la cercanía de las siembras y cosechas o un desastre natural.

Algunos poblados enviaban uno o más niños al Cuzco, elegidos por su excepcional belleza y perfección física libre de todo defecto. Los niños eran símbolos de pureza ante los dioses, y las niñas eran educadas en la Casa de las Vírgenes del Sol, donde vivían desde los ochos años de edad hasta el momento del sacrificio. La peregrinación podía durar semanas o meses, los elegidos para el sacrificio subían lentamente al santuario de alta montaña; la elegida era vestida con la mejor ropa, le daban de beber chicha (alcohol de maíz), y una vez dormida era depositada en un pozo.

Según la creencia Inca, los niños ofrendados no morían, sino que se reunían con sus antepasados, la coca y el alcohol inducía a estados relacionados con lo sagrado.

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El increíble nivel de conservación de estas momias hizo posible la realización de análisis técnicos que, junto con el perfecto estado de los objetos y textiles hallados en la estructura sepulcral, se llego a la conclusión de que datan de hace unos 500 años.

“Esto no es una momia disecada o un conjunto de huesos que es una persona,. Esto es un niño, y estos datos que hemos generado en nuestros estudios es realmente apuntan a algunos mensajes conmovedores acerca de sus últimos meses y años.”

Dado que el cabello crece aproximadamente un centímetro al mes y se mantiene sin cambios a partir de entonces, largos rizos de la doncella, trenzados contienen una línea de tiempo de los marcadores que registran su dieta, incluyendo el consumo de sustancias como la coca y el alcohol en forma de chicha.

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Parece haber sido seleccionada para ser sacrificada un año antes de su muerte, durante este periodo su consumo de coca aumentó durante, su consumo de alcohol aumentó sólo en sus últimas semanas.

Pruebas químicas y de ADN en su cabello, mostraron cambios en su dieta un año antes de su muerte, entre ellos el consumo de alimentos como el maíz y la proteína animal, tal vez carne de llama. (ola k ase?)

Se cree que el día de la muerte de la Doncella las drogas la pusieron en un estado de estupor o incluso la dejaron inconsciente. Las pruebas sugieren que estaba muy sedada justo antes de su desaparición.

An archaeologist unwraps the mummy of a sacrificed Incan child.

De acuerdo con la BBC las drogas y el alcohol jugaron un papel clave en los meses y semanas previos a la muerte de los niños. Los niños más jóvenes muestran niveles más bajos de la coca y el consumo de alcohol, tal vez debido a su condición de menores en el propio ritual, o de sus diferencias en la edad y de tamaño.