Apenas se dio a conocer que una expedición de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y de la Universidad de Kioto logró sacar del fondo tres sismómetros que servirán para entender mejor la actividad telúrica en la Brecha de Guerrero, pero también para conocer el riesgo de que ocurra un gran terremoto en esta zona… ¿De qué va esta misión?
La UNAM y científicos de Japón instalaron sismógrafos en la Brecha de Guerrero
Para empezar, tenemos que remontarnos a 2017, cuando los científicos de la UNAM y de la Universidad de Kioto instalaron los sismógrafos en la Brecha de Guerrero con el objetivo de saber si se acumula energía en la región y así conocer el riesgo de si podría ocurrir un terremoto de gran magnitud.
Y es que con este proyecto que estaba dentro de la Alianza para la Investigación en Ciencia y Tecnología para el Desarrollo Sostenible (SATREPS, por sus siglas en inglés) de Japón, se decidió desde 2016 estudiar los peligros de sismos y tsunamis en la costa de Guerrero, dijo al respecto Miguel Ángel Santoyo, sismólogo del Instituto de Geofísica, Unidad Michoacán.
“Este proyecto se enfocará al estudio del peligro sísmico, debido a los deslizamientos asísmicos y sismos en zonas cercanas de la brecha de Guerrero“, comentó también en el Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCyT).
¿Para que sirvieron los sismógrafos en la Brecha de Guerrero?
Estos instrumentos de medición que se colocaron en el fondo del mar y también en tierra sirvieron para calcular la sismicidad de la región, además de sus desplazamientos por medio de técnicas de GPS, de medición del movimiento entre las placas de Cocos y Norteamericana, y sismógrafos con frecuencia de banda ancha.
“Con ello sabremos si se acumula energía de deformación en la zona de la brecha y de ser así, si hay la suficiente energía acumulada para producir un terremoto o no; quizá ese deslizamiento asísmico relaja todo el esfuerzo y ese sismo ocurrirá hasta dentro de mil años, aunque no lo sabemos”, explicó en aquella ocasión Miguel Ángel Santoyo.
¿Por qué estudiar la Brecha de Guerrero?
Aunque todos sabemos que la mayoría de las veces que tiembla en la CDMX es por sismos con epicentro en el estado de Guerrero, si hablamos de la brecha que ese encuentra en esta entidad, justo entre Acapulco y Zihuatanejo, no se presenta un movimiento telúrico en esta zona desde 1911, el cual quedó en reportes históricos, según Raúl Valenzuela, investigador del Instituto de Geofísica.
“Tampoco hay una garantía absoluta de que el epicentro sea ahí”, agregó y luego dijo que sería un periodo “lo suficientemente largo como para hacernos temer que un sismo importante se generará en la región”.
Recuperan sismógrafos para conocer riesgo de terremoto en Brecha de Guerrero
Ahora, según información de EFE, los científicos de la UNAM y del a Universidad de Kioto han recuperado tres de los siete sismógrafos, también conocidos como OBS. Mientras tanto, uno de ellos ya lo dieron por perdido y otros tres siguen en el fondo del océano Pacífico.
Fue gracias al Puma, un barco oceanográfico de la UNAM, que llegaron a los instrumentos de navegación, pues navegó mil 400 millas desde el puerto de Mazatlán, Sinaloa hasta la unión de la Placa de Cocos y la de Norteamérica, donde se ubica la Brecha de Guerrero, la cual se extiende unos 200 kilómetros frente a la costa de Guerrero y del puerto de Acapulco.
Ahora recogerán los datos de estos instrumentos para conocer si existe el riesgo de que ocurra un terremoto de gran magnitud en este lugar de nuestro país, donde, desde hace prácticamente más de 100 años, no se registra un movimiento telúrico.
