Durante su reunión –la última de este año- con el Consejo Universitario, el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, José Narro Robles, fue tundido por hacerse de la vista gorda y no ofrecer un posicionamiento enérgico sobre las agresiones sufridas por los normalistas de Ayotzinapa, a lo que el representante de la Máxima casa de estudios no tuvo de otra que aceptar su error.
Aun así, justificó que desde que desaparecieron los 43 jóvenes en Iguala, Guerrero ha hecho 10 declaraciones al respecto… un tanto tardías, ya que los hechos ocurrieron el 26 de septiembre y él comenzó a hablar hasta 3 de octubre. Que esas “reflexiones” pudieran hacer sido “insuficientes” para algunos… pues eso ya es otra cosa.
Además de lo anterior, Narro señaló a los ocupantes del auditorio de la Facultad de Filosofía y Letras –el “Justo Sierra”, más conocido como “Che Guevara”- como los causantes de “la violencia más dura” que se ha presentado en territorio universitario. Dicho esto, advirtió a los llamados “okupas” que no les permitirá cerrar el campus… aunque no hizo señalamientos relacionados a una posible petición de desalojo de las instalaciones de la UNAM.
“No voy a facilitar que algunos violentos cierren Ciudad Universitaria; por eso tomamos y seguiremos tomando acciones responsables para no facilitar que se den esas condiciones”.
En referencia a la forma en que se ha vulnerado la autonomía universitaria, Narro comentó que es “impensable” que los “cientos de ilícitos” que se cometen en Ciudad Universitaria –como el fuego registrado en la estación de Metrobús- tengan una solución si no se permite que la policía siquiera pueda acercarse a la periferia de la Universidad.
Por su parte, varios consejeros de la Universidad abundaron sobre lo dicho por el rector y lamentaron que las autoridades universitarias hayan demorado tanto en ofrecer una declaración clara sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, hecho que calificaron como un “crimen de Estado” y en el que no sólo se dio el levantamiento de los jóvenes, también se dio la muerte de tres personas y la lesión de varias más.
También manifestaron su preocupación por la evidente complicidad entre autoridades y delincuencia organizada, por lo que exigieron que en nuestro país se establezca un sistema de justicia efectivo con el que se aplique la ley a servidores públicos que actúan al margen de ella “e incluso han afectado la autonomía de nuestra casa de estudios”.
Con esto parece que se concluye la discusión universitaria respecto a la situación actual del país. Con el fin de semestre, habrá que esperar hasta el próximo año para nuevas declaraciones.