México es el primer lugar en obesidad en todo el mundo, de acuerdo con la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación,
Según la FAO en el mundo hay 2 mil millones de personas que sufren de una o más deficiencias de micronutrientes, mil 400 millones más viven con sobrepeso y, de éstas, 500 millones son obesas,
En el informe Sistemas alimentarios para una mejor nutrición, la FAO señala que el costo de la desnutrición podría alcanzar hasta 5% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial, aproximadamente 500 dólares por persona, lo cual representa casi el PIB anual de Alemania.
Por primera vez en la historia, el número de personas con sobrepeso comienza a equipararse con el número de personas subnutridas en todo el mundo.
Para muchos países de América Latina es posible eliminar el hambre, es decir, que la población cuente con suficientes calorías, pero lo más difícil es mejorar la nutrición.
“Aunque se considera a menudo un símbolo de riqueza y abundancia, la obesidad suele ser un signo de nutrición deficiente”, advierte la FAO
Por ejemplo en Sudán antes el estereotipo de belleza eran las mujeres con curvas y carnosidades. Hasta hace dos generaciones, la costumbre era engordar a las novias antes de casarse. Según el rito tradicional sudanés, después de que la novia era engordada, se sentaba un par de veces diariamente en un baño de humo de madera perfumada por 40 días, hasta que su cuerpo se impregnaba de los aceites aromáticos y se le formaba una gruesa capa sobre la piel, al final se pelaba esta capa de piel, era doblada y se enviaba a la familia del novio, quien la pesaba y enviaba el equivalente en oro a la familia de su prometida.
De acuerdo con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), la población más pobre del país busca las calorías más baratas, de manera que tiene acceso a calorías de baja calidad, como los refrescos y alimentos con bajo contenido de proteínas y nutrientes, pero por la necesidad en que se ven por la pobreza optan por saciar el apetito sin nutrirse bien. De esta manera conviven problemas de obesidad y desnutrición en el mismo hogar.
Ser el país líder en obesidad, es para alarmarse, incluso en los hogares a los que está dirigida la Cruzada Nacional contra el Hambre se han encontrado problemas de obesidad, por lo que la estrategia a seguir es contra la mala nutrición.El gobierno debe implementar acciones urgentes, al igual que la sociedad, se deben reglamentar y exigir estándares mínimos de nutrición en los productos que consumimos.
Recientemente, cuando la obesidad hizo ruido en México, la Cámara de Diputados aprobó una reforma que obliga a las autoridades sanitarias y educativas a promover más el ejercicio entre los niños y una dieta baja en grasas y azúcares. La pregunta aquí es ¿ Cada persona es responsable de los gastos de su gordura o es el gobierno quien debe usar recursos públicos para atender enfermedades derivadas del sobrepeso en lugar de invertir en la cura de otras enfermedades no provocadas?
Es fundamental el uso de campañas que ayuden a hacer tangibles los beneficios de tener una dieta balanceada, alejarnos de las campañas prohibitivas que en lugar de educar sólo restringen. La tendencia hacia lo sano es irreversible.
