Con la novedad —o no tan “novedad” si han seguido las noticias sobre las largas orejas que tiene el gobierno—, nos venimos enterando de que México es un cliente consentido del espionaje mundial. Nuestro país no solo fue el primer comprador de Pegasus; somos, también, el mayor usuario de este software espía.
Un reportaje del New York Times cuenta la historia de cómo nuestro país, con la colaboración de Felipe Calderón, Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador, ha comprado y utilizado este software de origen israelí.
La historia —publicada por los periodistas Natalie Kitroeff y Ronen Bergman— cuenta los primeros acercamientos para comprar Pegasus en México. Detallan reuniones en bares de 2011, demostraciones del espionaje a los presidentes y cómo, 12 años después, nos hemos convertido en el país que más utiliza este software de espionaje.
México es el mayor usuario del software espía Pegasus
El reciente reportaje del New York Times confirma —con cuatro fuentes diferentes— que el software Pegasus se sigue utilizando en México; además, somos el país que más celulares a infectado con esta aplicación de espionaje.
Como se ha discutido desde hace meses, con la aparición de la investigación del Ejército Espía y otros escándalos recientes, en estos momentos, solo la SEDENA tiene acceso a este software. “Los militares de México son la unica entidad en el país que opera con Pegasus”, dice el New York Times, con la confirmación de cuatro personas que conocen los contratos.
En estos momentos —como en los sexenios anteriores— los celulares infectados con Pegasus pertenecen a periodistas, investigadores o a defensores de los Derechos Humanos.
Cómo México se convirtió en el mayor usuario de Pegasus en el mundo
La investigación del New York Times es interesante porque demuestra que el espionaje y la infección de celulares forman parte de un esfuerzo de tres sexenios distintos. Tan solo con las pruebas presentadas, sabemos que los gobiernos de todos los partidos han trabajado para usar Pegasus y para espiar a las personas que les resultan incómodas.
Todo comienza en 2011 cuando México fue el primer país en comprar Pegasus. La historia de estas negociaciones no era muy conocida.
De acuerdo con el New York Times, los empresarios de Israel que traían el software espía se reunieron con militares de México en un “despacho contable” de la Ciudad de México. Entre mujeres bailando en el tubo y shots de tequila, negociaron la compra del software de espionaje más avanzado en el mundo.
Los periodistas descubrieron que, en 2011, los empresarios hicieron una demostración de Pegasus a Felipe Calderón y a su Secretario de la Defensa.
En ese momento, el software demostró que podía hackear —sin ninguna manera de identificarse— a un teléfono Blackberry. Cuentan que el presidente no supo más sobre la compra de la aplicación de espionaje.
A finales de ese año, la empresa de Israel tenía un centro de operaciones en México donde 30 trabajadores de Pegasus entrenaban a 30 militares de México para utilizar la aplicación. “Una vez que los mexicanos podían usar Pegasus solos, hubo una corta ceremonia en diciembre para ‘entregar las llaves'”, comenta el periódico neoyorquino.
Desde entonces, el uso de Pegasus en México ha sido una constante. Durante el gobierno de Enrique Peña Nieto se usó en otras instituciones, como la PGR o el CISEN. También existen pruebas de que se usó para espiar en las desapariciones de Ayotzinapa.
Cuando cambia el gobierno y llega Andrés Manuel López Obrador sucedió exactamente lo mismo. Con pruebas forenses digitales se sabe que el Ejército en este sexenio ha infectado celulares de personas incómodas.
El software espía de Pegasus es controlado por el Ministerio de Defensa en Israel y ellos tienen que aprobar cualquiera de las ventas. Públicamente han dicho que prohibieron venderlo —o usarlo— en cualquier país que pudiera afectar los derechos humanos…. pero ese caso pareciera no aplicar a México.
Si quieren leer el reportaje completo del New York Times, lo PUEDEN ENCONTRAR AQUÍ. Nomás, aguas, que está en inglés.