Por los 700 periodistas que desde 2005 han sido asesinados, la impunidad que prevalece en estos casos y por el constante acoso del que son objeto aquellos que se “atreven” a ejercer la profesión, México es considerado el país más peligroso de toda América para ser periodista.
Para que después lo desmientan las autoridades, lo anterior consta en un informe de la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que se dio a conocer ayer con motivo del Día internacional para poner fin a la impunidad de los crímenes contra periodistas.
Según dicho informe, en los últimos cinco años 150 periodistas fueron asesinados en el continente, lo cual significa que cada 14 días un periodista es privado de la vida en la región… en el caso de México, uno de cada tres asesinatos documentados desde 2010 a la fecha fueron cometidos en el país. Claro, la relatoría de la CIDH no vincula a los crímenes con “asuntos pasionales”, sino con asuntos relacionados con la profesión de las víctimas: ejercicio de la libertad de expresión; informar, comentar u opinar sobre hechos sucedidos en su comunidad.
Pero el asunto no es nuevo: de acuerdo con el informe, desde la década pasada la violencia contra periodistas tiene niveles similares a los de ahora… lo mismo ocurre con la impunidad de los casos. Lo que podría considerarse como nuevo dato, es el hecho de que los crímenes contra comunicadores se ha agudizado en regiones en los que existe fuerte presencia del crimen organizado…
“En muchos casos, lamentablemente, se ha verificado que estas organizaciones ejercen la violencia en colusión con agentes estatales’’, lo cual debería implicar que los Estados tuvieran la obligación de “adoptar mecanismos especiales de protección para periodistas, defensores de derechos humanos y líderes políticos o de movimientos sociales amenazados’’, recomienda la relatoría.
En nuestro país, la falta de seguridad para periodistas ya había sido reconocida por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH)… ahora el asunto linda en lo internacional, al señalarse que en todo el continente México presenta más asesinatos contra los comunicadores, por encima de países como Honduras, Colombia, Guatemala y Uruguay.
La relatoría urgió a los estados del continente a intentar evitar y, en su caso, aclarar esos ilícitos, ya que para que no sigan ocurriendo es necesario que se investigue, juzgue y condene a todos los autores, tanto materiales como intelectuales. Por el momento ‘‘muy pocos autores intelectuales de estos crímenes recibieron algún tipo de condena y buena parte de las investigaciones avanzan muy lentamente o muestran graves deficiencias que han impedido aclarar las hipótesis vinculadas al ejercicio profesional’’, lamentó la grupo de la CIDH.
*Vía La Jornada
