De acuerdo con datos presentados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en el Módulo de Lectura (MOLEC), de cada 100 personas de 18 y más años de edad, en el 2017 sólo 45 dijeron haber leído por lo menos un libro; por su parte en el 2015, la relación era 50 de cada 100.
Según las cifras del INEGI, también se reporta que la población de 18 años en adelante que realiza algún tipo de lectura (libros, revistas, periódicos e historietas) decreció al 76.4 por ciento del 84.2 que se tenía en el 2015.
¿Pero por qué los mexicanos rehuyen a la lectura? Las razones indicadas van desde falta de tiempo (señalada por 45.6 por ciento), falta de interés en la lectura (24.4 por ciento) y porque simplemente se prefiere realizar otras actividades (14.8 por ciento).
Por otro lado, aquellos que dijeron leer con frecuencia indicaron que a esta actividad le dedican en promedio 39 minutos ininterrumpidos. Sin embargo, otra cifra resulta más reveladora del tipo de lectores en el país, pues sólo un 22 por ciento de estos comprende la mitad o menos de lo que lee.
¿Qué clase de materiales leemos en México? En cuestión de libros los más citados fueron los de literatura (40.8 por ciento), seguido de los de texto (33.6 por ciento), los autoayuda y religión (28.2 por ciento), cultura general (23.4 por ciento) y manuales, guías y recetarios (7.5 por ciento).
Si de revistas se trata, las más buscadas por los mexicanos fueron las de entretenimiento (38.2 por ciento), las de temas especializados o científicos (26.8 por ciento), las de salud (23.2 por ciento) y las de cultura general (20.9 por ciento).