Sentimos necesario puntualizar que nosotros no experimentamos ninguna clase de odio hacia los chinitos, pero es que a veces ellos no se ayudan…
Resulta que a las afueras de un templo en Nanchang en Jiangxi durante estas fechas hay una celebración religiosa, se instala un mercado y feria, y muchos turistas acuden a visitar el lugar. Todo va bien hasta aquí, lo malo es que precisamente en esta zona hay gran cantidad de vagabundos quienes generalmente buscan la limosna de los visitantes, así que para evitar incomodar a las familias los organizadores del festejo los metieron en jaulas.
Las personas deben mantener en las jaulas ante las miradas de los paseantes, pues si salen de su encierro serán expulsadas de la ciudad, de manera que los indigentes prefieren quedarse voluntariamente tras las rejas y desde ahí piden dinero.
Por supuesto que los defensores de los derechos humanos en China ya se hicieron escuchar diciendo que los pordioseros están recibiendo un trato de animales y que detrás de todo este panorama es gente que necesita ayuda y no marginarlos aún más.
Definitivamente es un problema social, pero en esta parte de China decidieron resolverlo así. ¿Ustedes qué opinan?
