El pasado domingo 26 de julio, la Fiscalía General de Justicia de Chiapas anunció la detención de Gerardo Vicente Grajales Yuca, médico urgenciólogo en el área COVID en el Hospital de Especialidades Vida Mejor, dependiente del Instituto de Seguridad Social de los Trabajadores del Estado de Chiapas (Isstech).

¿Por qué lo detuvieron? La carpeta de investigación señala que solicitó a la persona denunciante equipo e insumos para tratar a su padre “siendo que de acuerdo con la Secretaría de Salud del Estado el nosocomio cuenta con los medicamentos y el equipo necesario para atender a los pacientes“.

Se giró una orden de aprehensión en su contra por “la posible comisión del delito de abuso de autoridad en Tuxtla Gutiérrez” y además se le dictó la medida de prisión preventiva.

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Foto: FGE Chiapas

¿Quién presentó la denuncia en contra del médico?

Se trata de Karen Alejandra Ramírez Molina, hija del exdiputado local y exlíder del partido Mover a Chiapas, Miguel Arturo Ramírez López, quien murió debido los estragos del COVID-19 en su cuerpo y fue atendido por el médico Grajales Yuca.

De acuerdo con la esposa del médico referida por Proceso, Fernanda Ochoa, el médico fue capturado por intereses políticos ya que las pruebas presentadas en su contra son recetas médicas que no llevan su firma y dichos verbales de la hija del exdiputado quien también se ha desempeñado como funcionaria del partido.

Afirmó además que lo capturaron de inmediato ya que la denuncia penal fue presentada por la hija de un político influyente.

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Foto: Isaín Mandujano vía Twitter

Gremio exige su liberación

Por medio de un comunicado, el Comité Ejecutivo de la Sección 50 (de Chiapas) del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud manifestaron un total repudio a la detención arbitraria del doctor Grajales y afirman que desde tiempo atrás han denunciado desabasto de medicamentos, insumos y equipo para la atención de pacientes COVID.

Explican que no es un delito solicitar a los familiares lo necesario para salvar la vida de un paciente ante la escasez de insumos por lo que exigen el debido respeto y no criminalizar el acto médico.

De igual forma, los Colegios Médicos de México condenaron la “detención violenta, abusiva e ilegal” del médico y solicitaron un acto ante el hostigamiento, estigmatización y amedrentamiento en contra de actos médicos sin previa investigación.

“No nos oponemos a que se indague y se sancione como a cualquier ciudadano un incorrecto actuar profesional, pero no estamos de acuerdo de que se nos utilice para deslindar responsabilidades ajenas propias de un Sistema de Salud crónicamente deficiente”, se lee en un comunicado.

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Yo soy Gabriela Espinosa, pero díganme Gaby, si no siento que me regañan. Trabajo como reportera y redactora en Sopitas.com desde 2018 y desde entonces me enfoqué, en su mayoría, en hard news. En diciembre...

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