Este jueves, el Ministerio del Interior de Reino Unido anunció que los medicamentos derivados de la marihuana ya pueden ser recetados por los médicos en dicho país, ya que se demostró que su uso terapéutico es eficaz para el tratamiento de determinadas enfermedades.
Cannabis-derived medicinal products to be made available on prescription: https://t.co/lsgEyuIiai pic.twitter.com/d12DaZyyzI
— Home Office (@ukhomeoffice) 26 de julio de 2018
El recién nombrado ministro del Interior británico, Sajid Javid, informó que a partir de otoño aquellos pacientes que necesiten de medicamentos derivados de la marihuana, podrán tener “una esperanza”.
Making medicinal cannabis available on prescription will benefit the lives of ill patients currently suffering in silence. There is nothing harder than seeing your loved ones in pain – which is why I have taken this decision https://t.co/ZFmGgWdJgE
— Sajid Javid (@sajidjavid) 26 de julio de 2018
¿Pero, por qué lo legalizaron?
Fue el caso de dos niños con epilepsia, Alfie Dingley y Billy Caldwell, lo que logró que el gobierno se planteara permitir los medicamentos. Los medios se encargaron de difundir que les habían negado el acceso a aceite con base de marihuana.
Tanto Billy- de 13 años- como Alfie -de 6 años- usan un par de gotas del aceite al día para controlar sus crisis de epilepsia.
De acuerdo con El Mundo, hasta ahora la marihuana era considerada en Reino Unido como un medicamento clase uno, es decir, que no tenía ningún tipo de valor terapéutico y que no podía ser poseído ni recetado legalmente. La única forma era que tuviera fines de investigación, pero era necesaria la autorización del Ministerio del Interior.
Lo que ahora va a pasar es que el Departamento de Salud de ese país, así como la Agencia de Regulación de Medicamentos y Productos de Salud, tienen que definir lo que constituye un ‘medicamento derivado de la marihuana’ para que puedan ser preescritos.
Lo anterior ya que otras presentaciones de marihuana todavía estarán estrictamente prohibidas y no estarán disponibles bajo receta.