Las elecciones presidenciales están a la vuelta de la esquina. La atención de los comicios del próximo 1 julio se han centrado, durante las últimas semanas, en las batallas encarnizadas al interior del Frente Ciudadano por México y en el registro de decenas de precandidatos independientes —de toditos los perfiles— ante el Instituto Nacional Electoral (INE). Las cosas, de a poco, se comienzan a esclarecer. Hasta ahora sabemos apenas algunas cosas:

1) La exprimera dama Margarita Zavala no participará en el ejercicio como abanderada del Partido Acción Nacional (PAN), sino por la vía independiente.

2) El gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, sí se va a lanzar por la grande.

3) Emilio Álvarez Icaza, impulsor de la plataforma AhoraMX, no contendrá por el cargo.

4) Andrés Manuel López Obrador está más seguro que nada.

5) El panista Ricardo Anaya Cortés se asoma como el personaje con más posibilidades para encabezar la coalición de su partido con Movimiento Ciudadano y el Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Todos los involucrados y protagonistas políticos ya están mostrando sus cartas rumbo al proceso electoral del próximo año, aun cuando todavía cuentan con varias semanas para definirse. El ruido ha venido de todos lados, salvo del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Los tricolores han hecho mutis. Al día de hoy no se conoce con certeza quién será su abanderado. En la lista se encuentran personajes como Aurelio Nuño Mayer, José Narro Robles y Miguel Ángel Osorio Chong.

Pero quien, sin duda, se levanta como el amplio favorito es José Antonio Meade, actual secretario de Hacienda y Crédito Público. El economista no está afiliado al PRI pero este no es impedimento alguno, ya que el partido abrió sus candados en agosto y ahora permitirá que “ciudadanos simpatizantes” busquen cargos públicos avalados por su plataforma política.

José Antonio Meade, secretario de Hacienda y Crédito Público

Foto: Notimex-Francisco García

La figura de Meade se ha publicitado por doquier en las últimas semanas y hasta fue galardonada con el premio como el Ministro de Finanzas del Año de Latinoamérica por la revista Global Markets. El pasado 12 de octubre, José Antonio Meade aseguró que votó por Enrique Peña Nieto en la elección de 2012, aun cuando era colaborador de la administración del expresidente Felipe Calderón Hinojosa. En este contexto, los últimos días ha circulado en redes sociales el que podría ser el himno del funcionario peñista durante su campaña rumbo a la presidencia. La rola en cuestión es una movida canción de banda que nos receta frases bellísimas como: “Él es amigo, amigo de verdad. Si lo conoces lo puedes comprobar. Él es humilde, de buen corazón. Un gran mexicano, un gran servidor”.

¿Y qué tal esta otra?: “José Antonio Meade te invita a conversar, vamos todos, queremos mejorar. ¡Porque a todos sin duda nos va a escuchar!”.

¿Y qué nos dicen de este corito?: “¡Es nuestrroo amiiiigoooo Peeeeepe Meade!”.

De acuerdo con el programa de radio El Weso, la composición es obra del cantante Héctor Saúl Maldonado Martínez, conocido como “El Asul de la banda” (sic). Esta pegajosa canción, se informó en el noticiario, no es un jingle hecho por encargo para Pepe Meade, no vayan a creer algo así. Este sendo rolón no sería más que un regalo por parte de “El Asul”, un priista de hueso colorado que ha hecho canciones para políticos de Sinaloa, hacia el posible abanderado del PRI. El próximo año pinta difícil, no sólo por el proceso electoral, sino porque los ciudadanos nos vamos a tener que recetar horas y horas de canciones políticas horribles como esta.

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