Maria Alyokhina, integrante encarcelada del grupo musical Pussy Riot, anunció el inicio de una huelga de hambre. Esto debido a que la justicia rusa no le permite asistir a una audiencia sobre su petición de libertad anticipada.
Alyokhina, junto a Nadezhda Tolokonnikova y Yekaterina Samutsevich, también integrantes del grupo, purga una condena de dos años por vandalismo después de que fue detenida por grabar un video en la Catedral Ortodoxa de Cristo Salvador de Moscú, en donde tocaron una canción en contra de la reelección de Vladimir Putin.
Desde entonces han sido sometidas a un proceso de justicia bastante irregular que ha estado bajo la mirada internacional.
De acuerdo a las agencias Interfax y Ria Novosti, este miércoles el tribunal municipal de Berezniki inició el examen de la demanda de libertad anticipada presentado por Alyokhina, pero al que no le permitieron asistir a Alyokhina.
“Me declaro en huelga de hambre e insisto en mi participación en la audiencia (…) Prohíbo a mis abogados que participen en los debates hasta que me lleven al tribunal para asistir a la audiencia”, publicó en su cuenta de Twitter.
Habrá que seguir de cerca este caso y ver hasta dónde llega esta joven de 24 años con su huelga de hambre. Lo cierto es que el sistema de justicia ruso nuevamente vuelve a mostrar tintes de intolerancia y abuso de poder. Pero bueno, de qué nos quejamos…
