Aunque nadie lo pidió pero, ya que le trae ganas a la candidatura a la presidencia de la República, no está nada mal que lo haga, la ex primera le entró al “3 de 3”, ya saben, esa onda en la que los políticos presumen su nada creíble austeridad, pero en fin…
Así que, para no perder la costumbre, según las cuentas de la aspirante panista, entre sus artículos para El Universal, sus conferencias, dar clases en el Instituto Asunción México y lo de la renta de un departamentito, nomás saca alrededor de 868 mil pesitos al año. Dinero que no luce tanto, pero que seguramente ha de rendir con ayuda de los 8 millones 267 mil pesotes que factura su esposo, el ex presidente Felipe Calderón.
Al igual que otros políticos que han presentado su “3 de 3”, Zavala es mesurada en sus gastos: carro no tiene, la casa en la que vive es de su esposo y como patrimonio sólo tiene dos terrenos de 160 mil pesos. Ahhhh y uno ubicado en la delegación Álvaro Obregón cuyo valor oscila los 5 millones de pesos… no especulen: el costo de tan elevada propiedad fue cubierto con ayuda de Calderón.
Respecto a cuentas de banco, tiene cuatro en México y una en Estados Unidos. Nada espectacular: aunque no reporta cuánto dinero hay en cada una de ellas, señaló que sólo hay valores de 100 a 500 mil pesos. Tiene seis tarjetas de crédito y joyas por 191 mil pesos… además de obras de arte cuyo valor se aproxima a los 120 mil pesos.
Eso respecto a la declaración patrimonial, en lo relacionado a la de intereses, apuntó que su esposo es parte de los consejos de administración de las empresas Avangrid y World Resources Institute; además presta un edificio para Agros Navidad y es presidente de The Global Comission on the Economy and Climate.
¿Y con eso le alcanza para pasearse por país… digo, para hacer campaña? Pues sí. Curiosamente cuando se es de billete, las cosas son gratis: sus viajes por el territorio nacional, al Super Bowl, así como su entrada al juego de la NFL en México, fueron cortesía de grupos del PAN, Coca Cola Femsa y hasta Fox Sports.
Ah, claro. Ya sabemos porque no tiene auto: el transporte terrestre, en camionetas blindada, para ella y toda su familia corre por cuenta del Estado Mayor Presidencial.
